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El pleno tumba pagar la deuda bancaria y exige derogar la tasa de la basura al unirse PP y AV

La oposición evidencia la situación de minoría del gobierno, que no pudo aprobar una modificación de crédito para liberar 1,5 millones para inversiones | «Se canto peor mellor, que cada pau aguante a súa vela», avisa la alcaldesa

El momento de la votación en el pleno de Cangas en la que PP y AV fuerzan al gobierno local a exigir a la Mancomunidade do Morrazo la derogación de la tasa de la basura.

El momento de la votación en el pleno de Cangas en la que PP y AV fuerzan al gobierno local a exigir a la Mancomunidade do Morrazo la derogación de la tasa de la basura. / Gonzalo Núñez 

Cangas

La debilidad del gobierno en minoría en el Concello de Cangas quedó ayer retratada en dos votaciones de gran calado político, económico y simbólico. La suma de los votos del PP y Alternativa dos Veciños (AV) sirvió para tumbar la propuesta de la Concellería de Facenda de liquidar de manera anticipada dos créditos bancarios de algo más de 1 millón de euros y para aprobar una moción en la que se insta al ejecutivo local a exigir la derogación de la nueva ordenanza de la tasa de la basura ante la Mancomunidade do Morrazo. Una entidad en la que hasta final de año la presidencia le corresponde precisamente a Cangas y a su alcaldesa, Araceli Gestido.

La sesión plenaria comenzó con la dación de cuenta de la renuncia de la portavoz de EU y concejala de Cultura, Aurora Prieto, a la dedicación parcial que venía percibiendo como integrante del gobierno local debido a su jubilación. «Renuncio a esa dedicación parcial, pero seguirei tendo unha dedicación completa con todos vós», afirmó en alusión a la ciudadanía y a sus compañeros de gobierno en una breve intervención.

Tras este trámite llegó el primero de los asuntos de envergadura de la sesión: la propuesta para liquidar de manera anticipada dos préstamos bancarios que suman 1.050.000 euros a través de una modificación de crédito y así poder destinar 1,5 millones de euros del remanente líquido de tesorería a inversiones, como la mejora integral de la Avenida de Bueu. Desde su primera intervención PP y AV dejaron claro que votarían en contra. Los populares incluso acusaron al gobierno local de «tácticas mafiosas» por instar a la Asociación de Veciños Pedra Alta a presionarles para que apoyasen esta modificación presupuestaria, algo que tanto la alcaldesa, Araceli Gestido, y la edil de Facenda, Xiana Abal, negaron de manera rotunda.

La concejala de Esquerda Unida (EU), Aurora Prieto, lee durante el pleno de este viernes a la dedicación parcial que percibía del Concello de Cangas.

La concejala de Esquerda Unida (EU), Aurora Prieto, lee durante el pleno de este viernes a la dedicación parcial que percibía del Concello de Cangas. / Gonzalo Núñez 

El PP, a través de Pío Millán, puso en duda que realmente el Concello de Cangas cerrase el ejercicio económico de 2024 con un superávit de casi 1,8 millones de euros y para ello se remitió a los datos de la cuenta general, donde se recogía un resultado negativo de -1,5 millones de euros. Por su parte, la portavoz de AV, Victoria Portas, argumentó que el ahorro pretendido «é insignificante» puesto que los dos créditos vencen en junio de 2026 y uno de ellos no tiene siquiera intereses.

Resultado presupuestario versus resultado de estabilidad presupuestaria

Ante la discrepancia acerca de si existía ese superávit económico o no desde la Alcaldía se solicitó al interventor que lo aclarase. El habilitado nacional, tras aclarar que él no acudía al pleno a debatir sino a aportar datos técnicos, vino a explicar que en realidad las apreciaciones de unos y otros eran correctas porque basaban sus argumentos en conceptos que pueden parecer similares, pero que son diferentes. Uno es el resultado presupestario, que es el que se incluye en la cuenta general y que es una comparativa de ingresos y gastos en la liquidación del presupuestos. El otro es el resultado de estabilidad presupuestaria, que es el que se esgrimía desde el gobierno local, y que mide con criterios del Estado o la UE el déficit o superávit que se registrase. «Son dos magnitudes que aunque se llamen parecido y tengan un punto de partida similar llegan a resultados distintos porque sus objetivos son totalmente diferentes», expuso el interventor.

La explicación no cambió en absoluto el sentido del voto de PP y AV, que mantuvieron su negativa. La alcaldesa fue muy dura antes de proceder a la votación de este asunto, argumentando que los informes avalan la propuesta municipal y que la negativa de ayer supone retrasar la inversión de 1,5 millones de euros en la Avenida de Bueu. «Xa sei [que para algunos] canto peor mellor, pero polo menos que a xente o saiba: que se imos a estar peor é polo voto de AV e PP. Que cada pau aguante a súa vela!», concluyó antes de que el pleno tumbase la propuesta.

La minoría en la que gobierna la coalición BNG-PSOE-EU volvió a quedar patente en el debate sobre la moción que el PP presentó en los tres concellos de O Morrazo para instar a la Mancomunidade a derogar el acuerdo del 13 de octubre en el que se aprobaba inicialmente la nueva ordenanza y subida de la tasa de la basura. Una moción que el jueves se debatió en Moaña, donde resultó rechazada con los votos del BNG y la abstención del PSOE, y que el lunes se debatirá en Bueu, donde previsiblemente también decaerá puesto que BNG y PSOE cuentan con mayoría absoluta.

Los incidentes de la asamblea de la Mancomunidade: una muestra de "enfado colectivo" para el PP y una "instigación á violencia" y un "circo" para el tripartito

En el caso de Cangas PP y AV volvieron a mostrar su sintonía en este asunto y lograron que se aprobase (11 votos contra 10), aunque los efectos prácticos de la moción se prevén nulos. Eso sí, el debate se desarrolló en unas condiciones radicalmente diferentes a las de la asamblea del pasado 13 de octubre. Un día al que todos los partidos aludieron, pero desde un punto de vista diferente. La portavoz del PP, Dolores Hermelo, calificó lo sucedido en aquella jornada como una muestra «do enfado colectivo» por la ausencia de diálogo previo y por los incrementos previstos en la tasa, que volvió a enumerar, y acusó a los grupos del gobierno local de «sacar de contexto» lo sucedido.

Desde el tripartito a su vez responsabilizaron al PP de «instigar a violencia» y de «montar un circo», además de criticar que no condenasen los actos de violencia registrados durante esa jornada. «Agora queren facerse un lavado de cara e voltar a vía institucional, cando foron os maiores instigadores da violencia», reprochó el portavoz del BNG, Antón Iglesias, que a su vez alabó las propuestas «construtivas» recabadas durante las dos últimas semanas en las reuniones sectoriales con asociaciones de vecinos, hostelería y empresarios.

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