Wofco-Fandicosta se blinda contra el fuego

Un virulento fuego calcinó, en mayo de 2016, las naves de Fandicosta en Domaio, afectando a un almacén de cartonaje, una planta de elaboración de más de 2.000 metros cuadrados, un frigorífico con capacidad para 800 toneladas y dos cámaras de 8.000 toneladas de capacidad, además de las oficinas.

Nueve años después y con la empresa Wofco-Fandicosta a pleno rendimiento, este miércoles se alertó de un nuevo fuego, en el edificio del comedor y de vestuarios del personal. Era un simulacro que se prolongó durante unas dos horas y que puso a prueba la coordinación tanto del personal para salir en seguridad como de los equipos de extinción.

La columna de humo del fuego simulado empezó a verse alrededor de las 10.20 horas. Sobre las 11.35 horas, el servicio de emergencias 112 llamó a los distintos equipos de seguridad. Por la rampa principal accedieron efectivos de la Policía Local de Moaña, voluntarios de Protección Civil de la villa y de Cangas, un camión de los Bombeiros do Morrazo (los de Vigo no fueron necesarios por la pequeña magnitud del incendio), la Guardia Civil y efectivos de Axega, que en un primer momento no podían acceder a la zona del fuego debido a la cantidad de humo en el interior.

Antes, la primera intervención correspondió a los propios trabajadores que proyectaron agua sobre la zona afectada y, con la ayuda de trajes de protección química y equipos de respiración autónoma, entraron en la sala de máquinas para cortar los suministros de amoníaco y dióxido de carbono, así como la electricidad de la zona afectada.

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Mientras llegaban todos los efectivos, cerca de un centenar de trabajadores eran evacuados por departamentos, saliendo de forma ordenada desde sus puestos de trabajo y dirigiéndose hacia el sur de la dársena para llegar al muelle del antiguo varadero, desde donde presenciaron el operativo ya en seguridad. Además, se simuló el rescate de dos víctimas con quemaduras y problemas respiratorios, que trataron de ser reanimados por parte de los efectivos de Protección Civil, falleciendo uno de ellos. Intervino también una ambulancia de la Cruz Roja.

Por mar llegaron los refuerzos que permitirían extinguir el incendio rociando la zona afectada con cañones de agua. Por esta vía, desde la ría, hicieron su aparición efectivos como Salvamento Marítimo, prácticos de Vigo, lanchas de Capitanía Marítima, efectivos de la Autoridad Portuaria, de Remolcanosa y de la empresa que lucha contra la contaminación SEGEM, que intervino controlando un supuesto vertido frente al muelle utilizado barreras flotantes anticontaminación.

Los intensos chorros de agua del remolcador «Talavera» atrajeron la atención de los vecinos que observaban todo el despliegue desde el mirador del aparcamiento disuasorio de Domaio. Primero los cañones de agua se activaron sobre la ría para finalmente rociar la zona afectada por el supuesto fuego asistiendo a la extinción del mismo, que se dio por controlado aproximadamente a las 12.00 horas, cuando parte del personal de Fandicosta estaba ya trabajando en el exterior de la parte sur, utilizando las carretillas de carga.

Una vez levantado el dispositivo, los cuerpos participantes evaluarán los puntos clave comprobados a lo largo de la mañana, incluyendo la coordinación interinstitucional, la accesibilidad de las rutas de emergencia y la respuesta ante la fuga química.

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