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El BNG celebra asambleas abiertas para aplacar la rebelión de la basura

Las reuniones transcurrieron sin incidentes y se demandó información sobre bonificaciones a la nueva tasa | Hosteleros y comerciantes concretaron ayer alegaciones en Fecimo

Reunión de hosteleros y comerciantes ayer en Fecimo en Cangas. |  Gonzalo Núñez

Reunión de hosteleros y comerciantes ayer en Fecimo en Cangas. | Gonzalo Núñez

Cristina G/David G./Juan C.

Cangas/Moaña/Bueu

El BNG de O Morrazo quiere aplacar la rebelión que ha supuesto la subida de la tasa de la basura en Cangas, Moaña y Bueu, que provocó graves disturbios en el pleno de la Mancomunidade de O Morrazo del pasado lunes 13, en donde se aprobó inicialmente, con cientos de manifestantes y los gobernantes saliendo escoltados por la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil bajo lluvia de piedras, huevos y bolsas de la basura de los contenedores tirados ante el Concello de Cangas. Por eso que el Bloque ha puesto su maquinaria a funcionar y el lunes a última hora celebró asambleas abiertas en cada uno de los municipios para informar de la nueva tasa y escuchar a los colectivos. Fueron asambleas sin ningún tipo de jaleo, pero eso no quiere decir que el conflicto no siga, pensando en el próximo pleno que se va a celebrar en Cangas, aunque municipal, el viernes 31. El PP insiste en frenar esta subida de la tasa de la basura y que se revoque el "tarifazo".

Mientras, colectivos de hostelería y de comercio de los tres municipios se reunieron ayer en la sede de la Federación de comerciantes (Fecimo) en Cangas para consensuar las modificaciones que se van a pedir en el plazo de alegaciones a las nuevas tarifas, sobre todo en los sectores más afectados como son la hostelería, el hospedaje y talleres, señala la presidenta de Fecimo y responsable de la Asociación de comerciantes de Cangas, Carmen Pereiro, que destaca la «buena sintonía». Este lunes ya salió publicado en el BOP el anuncio de los presupuestos de la Mancomunidad, que se aprobaron inicialmente en la polémica asamblea del lunes, con un plazo de alegaciones de 15 días y para hoy se espera el de la nueva ordenanza. Los colectivos alegan, por ejemplo, que los hoteles no trabajan al 100% durante todo el año.

En Moaña, la asamblea del BNG se celebró en el colegio de Reibón con cerca de 70 personas y presidida por el responsable local, Odilo Barreiro, y la alcaldesa, Leticia Santos, que centró su exposición en aclarar el origen de lo que sucede con la regulación de la basura a nivel europeo, estatal y gallego y por qué se revisa ahora la tasa. Desmenuzó el escudo social que contiene la ordenanza y las exenciones que «van a permitir atender a las personas más vulnerables». También se centró en las bonificaciones a las que podrán acceder tanto las viviendas como los diferentes establecimientos en los que el impulso al reciclaje es fundamental. Dejó claro que la nueva tasa podrá bajarse si Sogama reduce el canon que cobra a todos y si se aumenta el reciclaje, además de incidir en que la nueva tasa es imprescindible para mejorar el actual servicio. La mayoría de las preguntas se centraron en las bonificaciones al comercio o cómo sumarse al sistemj de recogida puerta a puerta. También preguntaron cómo se podía sumar una vivienda al compostaje que contempla bonificación del 15% en la tasa.

En Cangas, la responsable local del BNG y edil Xiana Abal, asegura que la asamblea, que se celebró en el centro social, reunió entre 20-25 personas y destaca que la gente mostró interés por las bonificaciones y conocer la situación de la Mancomunidad. Añade que todo transcurrió tranquilo.

En el caso de Bueu la asamblea se celebró en el Centro Social do Mar, con la asistencia de unas 40 personas. Las explicaciones corrieron a cargo del alcalde, Félix Juncal, y del edil de Facenda, Xosé Leal, que hicieron una detallada radiografía de la situación del servicio; de sus costes, incluyendo el aumento del canon de Sogama; las mejoras previstas; y los descuentos y bonificaciones. El tono de la reunión fue distendido y los asistentes, entre ellos comerciantes, aprovecharon para plantear casos concretos y cuál sería el importe final a pagar. «Ata agora falouse moito dos prezos máximos, pero non dos descontos. Fíxose un amplo desglose e a xente agradeceu esa información», explican desde el BNG. Previamente, a nivel Concello el gobierno local ya mantuvo una reunión el viernes con la hostelería y que transcurrió en un ambiente similar.

Una opinión muy diferente expresa el concejal no adscrito, Daniel Chapela, que calificó la asamblea convocada por el BNG como una «felatomanía» [sic] y calificó al alcalde como un «calzonazos». «Sabe que o BNG aprobou unha taxa impopular, pero non ten carácter nin capacidade de dar a súa opinión».

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