Muere el último de los cinco gatos de la camada arrojada a la basura en Cangas

Ninguna de las crías de la camada de cinco gatos que una persona arrojó a la basura en Cangas, en una bolsa en un contenedor en el barrio de Cunchido de Arriba, en Darbo, ha sobrevivido. La Asociación Colonias Canguesas recibió ayer la confirmación que el último de los gatitos había fallecido, pese a que se había intentado todo por salvarle la vida, aunque ya desde la asociación canguesa reconocían la dificultad de que salieran adelante dado que cuando fueron a rescatarlos del contenedor tenían no más de dos días de vida. Eran crías muy pequeñas y habían estado dentro de una bolsa, con frío y sin alimento, en unas condiciones muy difíciles como para poder salir adelante.

Vecinos de Cunchido habían alertado a la Policía Local de que oían maullar fuertementre dentro del contenedor y los agentes dieron aviso a Colonias Canguesas. Dos de sus integrantes acudieron y removiendo la basura encontraron una cría dentro de una bolsa negra llena de basura y otras más dentro de otra bolsa blanca en su interior, en donde hallaron una colilla y entre los residuos, restos de pienso de pájaro.

Fue el 5 de marzo cuando la camada fue localizada dentro del contenedor y la primera expresión de la persona de Colonias Canguesas cuando abrió la bolsa fue de dolor: «Ay por Dios, por Dios» mientras que su compañera repetía «Rápido, rápido». Había que trasladarlos con urgencia y en la casa refugio, cedida por el Concello en Cimadevila, les dieron los primeros cuidados, con mucho calor y alimento. Ya ese mismo día, uno de los gatitos murió. Los otros cuatro fueron llevados a la Asociación Patudos, en Tui.

Localizan en un contenedor en Cangas la primera camada tirada de cinco gatos

Al día siguiente moría otra de las crías y así sucesivamente hasta la confirmación ayer de la muerte de la última de ellas.

El hecho fue denunciado por el Concello de Cangas ante el Seprona. Desde Colonias Canguesas recuerdan la importancia de esterilizar los gatos, que hacen falta campañas de concienciación y que desde el Concello se esterilizan las colonias. También señalan que los cuerpos de seguridad necesitan formación y perseguir estos «crímenes» con castigos a quienes los hacen. Añaden que casos como el de Cangas se repiten por todas partes, cientos y miles de gatitos son abandonados recién nacidos por la irresponsabilidad de los dueños que los tienen sin castrar.