Las cofradías afrontan la campaña de Navidad con una caída de 706.000 euros
Moaña, Bueu y Cangas acumulan descensos que oscilan entre los 358.000 y los 100.000 euros entre enero y septiembre | La única excepción en Aldán-O Hío, que mejora sus cifras
Dos navalleiros de Cangas descargan, ayer delante de la lonja, las capturas de la jornada. / Gonzalo Núñez
La flota de bajura de los distintos oficios y artes de las cofradías de O Morrazo afronta unas fechas clave en el sector. Las fiestas navideñas están a la vuelta de la esquina y en pocas semanas se levanta la veda de la centolla, una de las especies estrella. Pero los datos acumulados de los primeros nueve meses del año 2024 no parecen invitar al optimismo. Las ventas conjuntas entre Cangas, Bueu, Moaña y Aldán-O Hío registran un notable bajón con respecto al mismo periodo de 2023. Así, entre enero y septiembre de este año la facturación global no llega a los 6,1 millones de euros frente a los casi 6,8 millones de los primeros nueve meses del ejercicio 2023. Una reducción de 706.114 euros, que representa más de un 10%.
A la vista de estos datos parece difícil que las lonjas de la comarca puedan igualar los datos del conjunto del año 2024, en el que por segunda vez en la historia las ventas conjuntas superaron lo 10 millones de euros. De momento la única excpeción en este escenario a la baja es la Cofradía de Aldán-O Hío, que logra mejorar sus resultados: pasa de los 557.898 euros de los primeros nueve meses de 2023 a casi 610.000.
En el extremo contrario se encuentran Bueu y Moaña, que son las que registran los descensos más acusados. En el caso de Bueu, entre enero y septiembre de 2023 rozó los 2 millones de euros, pero en el mismo periodo de este año 2024 la facturación cayó en más de 310.300 euros y se queda en 1.666.173 euros. Detrás de estos datos están los problemas en la pesquería del pulpo y con el percebe. El cefalópodo sigue siendo la seña de identidad de la flota de bajura de Bueu y en los primeros nueve meses del año se subastaron 59.300 kilos con un volumen de negocio de 612.550 euros. En 2023 fueron, más de 91.000 kilos y 902.300 euros.
El presidente de la Diputación, Luis López, y de la Federación Provincial de Confrarías, José Manuel Rosas, (los dos en el centro), ayer en la firma del convenio para las subvenciones a los pósitos. / D.P.
La situación del percebe, antaño la segunda especie en importancia, es todavía más grave. La agrupación de percebeiros acumula varios paros en los últimos años debido a la delicada situación del recurso en la isla de Ons. Los profesionales llevan sin salir al mar desde abril y de momento es imposible aventurar si podrán trabajar en navidades.
En Moaña la contracción en las ventas es todavía mayor, con casi 358.000 euros menos. Si entre enero y septiembre de 2023 se acercó a los 1,4 millones de euros, en estos primeros nueve meses apenas supera el millón de euros. Casi todas las especies registran un bajón, que son especialmente significativos en la cornicha (de 52.700 kilos y 306.664 euros a 23.150 kilos y 166.377 euros); la almeja fina (de 2.300 kilos y 108.860 euros a solo 445 kilkos y 32.984 eiros), la japónica (de casi 41.000 kilos y cerca de 534.500 euros a 28.212 kilos y 476.000 euros) o el berberecho (de 8.770 kilos y 123.300 euros a menos de 4.000 kilos y 49.600 euros).
Cangas tampoco escapa de esta tendencia bajista, aunque parece resistir mejor. El descenso en el volumen de capturas es de unos 25.000 kilos y en la facturación se nota en casi 100.000 euros: de 2.894.579 euros entre enero y septiembre de 2023 a 2.795.909 euros en el mismo periodo de este año. Unos resultados en los que influye la caída de pulpo (de 375.500 euros a 290.500), el percebe (de casi 560.000 euros a 418.000 o la centolla (de 96.000 euros a 61.000)
Puestos vacíos en la plaza de abastos de Moaña. / Gonzalo Núñez
Desplome de clientes en la plaza de abastos de Moaña
La plaza de abastos de Moaña está atravesando un momento difícil, según explican desde el colectivo de vendedores. Los clientes han bajado mucho en el último año y una de las principales razones es precisamente que los puestos de venta de pescado cuentan con menos género y cantidad. Alegan que las capturas de los pescadores son menores y que el precio de los productos se dispara, haciendo que no sea atractivo para las placeras adquirirlo para venderlo al público final.
Esta menor presencia de pescado atrae a menos clientes al principal mercado de productos frescos del municipio y repercute también en el resto de negocios, como fruterías o carnicerías. A esto se suma que, por jubilación, hay en estos momentos cuatro puestos cerrados, tres de carne y uno de pescado y no se descarta otra jubilación próxima de una de las vendedoras.
La Diputación eleva hasta los 350.000 euros las ayudas a los pósitos
El presidente de la Diputación, Luis López, se reunió ayer con la Federación Provincial de Confrarías de Pontevedra, presidida por el patrón mayor de Bueu José Manuel Rosas, para trasladarle un aumento en la línea de subvenciones a los pósitos de cara a 2025. Un incremento de hasta el 40% con respecto a este año y que llegará hasta los 350.000 euros. Aseguran que se trata de una muestra de apoyo al sector, afectado por el aumento de costes, recurentes episodios de toxinas o los efectos de los temporales. «Na Deputación seguiredes a ter un apoio sólido para capear os temporais que poidan vir», sentenció Luis López.
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