El Club do Mar Bueu se moviliza ante el “silencio” de Costas y Portos por la rampa

Deportistas, técnicos y directiva exigen un acceso seguro para el embarque y desembarque

La concentración organizada por el Club do Mar Bueu el día de Nochebuena para exigir el arreglo de la rampa.

La concentración organizada por el Club do Mar Bueu el día de Nochebuena para exigir el arreglo de la rampa. / FdV

Bueu

El Club do Mar Bueu ha decidido pasar a la acción y movilizarse. El primer acto de protesta fue el día de Nochebuena con una concentración delante de su sede con una pancarta en la que reclama la dotación de un acceso digno al mar de manera inmediata. La entidad lleva años denunciando el mal estado de la rampa situada delante de la nave de deportes náuticos de Pescadoira y el peligro que supone para sus deportistas, muchos de ellos jóvenes menores de edad, la ausencia de un acceso en condiciones.

El presidente del club, Manuel Juncal, explica que la decisión de movilizarse se adopta porque “la única respuesta que recibimos por parte de Costas del Estado y Portos de Galicia es el silencio”. En la concentración de Nochebuena participaron deportistas, directivos, familias... y con un mensaje unánime: “Queremos que los políticos y los funcionarios públicos tomen cartas en el asunto y lo resuelvan ya”.

A principios del mes de diciembre desde Costas del Estado se pusieron en contacto con la directiva del club para solicitar documentación y a continuación otra de Portos de Galicia, que son las dos administraciones con competencias en la zona. “Parece ser que se iban a reunir el martes 12 de diciembre. No sabemos nada, suponemos que se habrán reunido, pero lo único que tenemos es silencio”, explican desde la junta directiva, que acaba de renovar su mandato para otros cuatro años.

El Club do Mar Bueu urge una reunión a tres bandas entre Costas, Portos de Galicia y el Concello de Bueu, que también presiona para que la administración estatal y la autonómica se pongan de acuerdo para aportar una solución de garantías para los deportistas. En abril la directiva remitió a las tres partes un informe de la situación con fotografías para ilustrar la situación de peligro y exigir soluciones.

El actual estado de las rampas de Pescadoira se vincula con la obra de ampliación del espigón del puerto de Bueu, que provocó un evidente cambio en las dinámicas del litoral. Desde hace años en la playa situada al lado de la explanada de la lonja se acumula una cantidad “desproporcionada” de arena, un sedimento que procede precisamente de la zona en la que está la nave del club. Eso redunda en el desgaste de las bases del muro y en que las rocas quedan a la vista, lo que supone un peligro para la maniobras de embarque y desembarque.

El precario estado de las instalaciones de acceso al mar y la sensación de “desamparo” del club contrasta con su brillante momento deportivo. Este año acaba de lograr el ascenso a la ACT y a la Liga Eusko Label del traineras y será uno de los dos representantes gallegos en la competición.

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