La expansión de Castiñeiras estará rodeada por una senda peatonal de 4,5 kilómetros

La asociación de empresarios y propietarios de terrenos que promueven la ampliación del polígono de Castiñeiras –Aprointer– presentará la próxima semana por segunda vez el proyecto para su aprobación inicial ante el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS). Los promotores y el equipo redactor esperan que antes de final de año el documento pueda estar aprobado provisionalmente y que la aprobación definitiva no se demore más allá del primer trimestre de 2024. Ayer acudieron al Concello de Bueu para presentar y explicar sus planes al gobierno local. En esa reunión estuvo presente el concejal de Urbanismo, Martín Villanueva, que mostró el absoluto respaldo municipal a una intervención que prevé un sendero verde perimetral de 4,5 kilómetros.

La tramitación acumula casi un año de demora con respecto a las previsiones iniciales de los empresarios. El proceso se ralentizó por la necesidad de incluir una relación con los propietarios de las parcelas catastrales incluidas en los 210.000 metros cuadrados del nuevo ámbito. En la primera mitad del año pasado llegó a registrarse el proyecto, aunque desde Aprointer decidieron retirarlo enseguida. Debido a las limitaciones de la Ley de Protección de Datos los promotores no tienen acceso a esa información catastral y solicitaron al IGVS que tramitase la correspondiente solicitud.

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Finalmente, han decidido presentar el proyecto sin ese listado porque entienden que no es imprescindible para este trámite de aprobación y con el compromiso de aportarlo en una fase posterior.

El objetivo es agilizar la tramitación y que adquiera “velocidad de crucero” para poder desarrollar la expansión del único polígono industrial de la comarca. La aprobación inicial depende del Consello de la Xunta e implicará la apertura de un periodo de exposición pública y para recabar informes sectoriales de los departamentos implicados, que en este caso son todos de ámbito autonómico. “Tienen un plazo de tres meses para informar y si no se pronuncian en ese tiempo se entiende que el silencio es positivo”, explica Roberto López, de la consultora Urben.

Los promotores recalcaron ayer su interés por una absoluta “transparencia” en la tramitación del proyecto e incluso avanzan que promoverán un proceso de participación para poder mejorar los espacios públicos y zonas verdes. Aprointer aspira a que esta ampliación convierta al polígono de Bueu en el primero de Galicia y de España en contar con un certificado de sostenibilidad ambiental. “Sería un valor añadido para los propietarios y cada vez hay más grandes empresas interesadas en contar con esas certificaciones”, insiste Roberto López.

La expansión de Castiñeiras estará rodeada por un gran cinturón verde de 4,5 kilómetros en forma de senda peatonal, que permitirá conectar el polígono con el centro de Bueu y el lugar de Bon aprovechando otros caminos ya existentes. Este trazado perimetral permitirá recorrer la zona sin necesidad de entrar al propio polígono, que igualmente en su parte interior incluirá aceras y sendas peatonales.

El crecimiento de suelo industrial se articulará en tres bolsas de terrenos y la que está situada al norte [entre Nodosa y las cercanías de Forqueiros] tendrá frente a la carretera provincial EP-1301. En este espacio se prevé una franja peatonal de siete metros entre el límite de la calzada y el frente de las nuevas parcelas urbanizables.

La entrada principal está previsto articularla desde la rotonda de acceso y salida del Corredor de Morrazo. El proyecto prevé intervenir en la franja del vial entre esta glorieta y la que está situada en las inmediaciones del tanatorio, que pasará de los dos carriles actuales a tener cuatro, dos en cada sentido para facilitar el tráfico.

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