La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade de la Xunta de Galicia adjudicará en los próximos días a la empresa Arines Obras y Proyectos SL la ejecución del tramo de aceras de la PO-315 entre Beluso y Achadiza. Lo hará por un importe de 293.610 euros IVA incluido al ser esta firma la que ha presentado la mejor oferta tanto en el apartado económico como en el técnico. La mesa de contratación ya la ha propuesto esta semana como ganadora de este concurso y únicamente queda la confirmación oficial para que asuma las actuaciones.
En total se han presentado siete propuestas para un precio base de licitación de 242.653 euros (sin el IVA), que la ganadora ha rebajado en algo más de un diez por ciento con una oferta de 242.653 (sin IVA), lo que le ha valido para lograr los 100 puntos. A eso ha sumado los 78,50 puntos del apartado técnico para una puntuación total ponderada de 89,25. Oresa Construcción y Servicios Globales y Narom ocuparon la segunda y tercera posición, con 86,22 y 82, 42 puntos, respectivamente. Las propuestas económicas de ambas eran muy similares, ya que la primera ofertó 244.630 euros y la segunda 244.359 euros.
Las obras de mejora de la seguridad peatonal en la PO-315 en el tramo Achadiza-Beluso suponen la construcción de una acera de 600 metros de longitud en el margen izquierdo entre los puntos kilométricos 2+150 y 2+750. Esta actuación permitiría conectar las aceras ya existentes en los núcleos de Achadiza y Rúa Nova de Arriba.
Dos paradas de autobús con marquesinas
Asimismo, el proyecto contempla la ampliación de la plataforma vial, así como la instalación de sendas paradas de autobús con marquesinas a ambos lados de la calzada a la altura del punto kilométrico 2+500. Una de ellas será de nuevo cuño mientras que la otra será trasladada unos metros desde su ubicación actual. También se incluye la estabilización del desmonte en una curva pronunciada entre los puntos 2+580 y 2+660, así como la construcción de un muro de contención entre el 2+490 y el 2+535. El plazo de ejecución es de seis meses.
En total se verán afectadas ocho fincas con una superficie de alrededor de 900 metros cuadrados. La Consellería de Infraestruturas y la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) han convocado a los propietarios de estos terrenos el 2 de marzo en el concello buenense para formalizar las actas previas de ocupación que permitan expropiar estas fincas. La firma definitiva de las actas está prevista para el 25 de abril.