Personal y usuarios de la piscina protestan y recogen firmas contra el recorte de horarios

La plantilla inicia concentraciones ante la instalación deportiva y el Concello | Teme estar pagando “las deudas de la Administración con la concesionaria” | Sufrirá bajadas de salarios

Trabajadores y varios clientes de la piscina, ayer concentrados ante el complejo deportivo. |   G.N.

Trabajadores y varios clientes de la piscina, ayer concentrados ante el complejo deportivo. | G.N. / Fran G. Sas

Los trabajadores de la piscina municipal de Moaña, gestionada por Aqualia, iniciaron ayer las concentraciones anunciadas tras desvelar la intención de la empresa concesionaria de reducir los horarios y las horas de trabajo de al menos siete de los 16 trabajadores. Con el apoyo de usuarios que se consideran “afectados por el recorte horario”, y el respaldo de la CIG, los empleados se concentraron hoy ante el Centro Deportivo Moaña y ante el Concello. Exigen a la empresa que renuncie a los cierres al mediodía y los sábados por la tarde, que recortarían “un 20% el salario de parte de la plantilla”. Cargan también contra el Concello al entender “que no sentimos un respaldo explícito a nuestras demandas”.

Temen, los trabajadores, estar pagando los platos rotos “de las deudas presuntamente acumuladas por el Concello con Aqualia, que debía compensar que durante cuatro años los precios no se suban según el IPC”. Ante la casa consistorial hicieron referencias directas al gobierno bipartito en la figura de la alcaldesa con el cántico “Leti, escoita, a piscina está en loita!”.

Personal y usuarios de la piscina protestan y recogen firmas contra el recorte de horarios

El monitor de la piscina Miguel Pena. / Fran G. Sas

“No sentimos un respaldo del Concello a nuestras demandas”

La concesionaria argumentó, ante el gobierno local, la reducción de horarios ante la desbocada subida de precios del gas y la electricidad. Y es que el consumo energético de la piscina es muy alto por la climatización del vaso de agua. La concejala de Deportes, Dolores Chapela, aseguró el fin de semana que el contrato de concesión está en manos de los servicios jurídicos municipales para valorar si pueden impedir este cambio.

Personal y usuarios de la piscina protestan y recogen firmas contra el recorte de horarios

Dolores Varlverde. Usuaria de la piscina. / Fran G. Sas

“Tememos que el servicio empeore y acabe cerrando”

El sindicato alerta de que los cierres de lunes a viernes pueden ser entre las 13.30 y las 16.00 horas mientras que también se cerrará la instalación los sábados por la tarde. Se trata de unas franjas que fueron ganadas hace unos años coincidiendo con un incremento de precios.

Ayer la alcaldesa, Leticia Santos, declinó hacer declaraciones al respecto y aclarar si hay deudas del Concello con la concesionaria. Se limitó a asegurar que “las reclamaciones de la empresa concesionaria están en tramitación, pendientes de los correspondientes informes técnicos”. El aviso de Aqualia de los cambios en el servicio que pretende aplicar desde el 1 de diciembre llegó al Concello hace una semana.

Personal y usuarios de la piscina protestan y recogen firmas contra el recorte de horarios

María Isabel González. Usuaria de la piscina. / Fran G. Sas

“El horario del mediodía nos facilita mucho para organizarnos”

Los usuarios recogen firmas contra el recorte.

Los usuarios recogen firmas contra el recorte.

Recogida de firmas

Los usuarios que participaron en la concentración iniciaron una recogida de firmas contra esta decisión. “Nos repercute mucho que cierren al mediodía, porque a veces venimos a la piscina a las dos o a las tres. Nos facilita organizarnos y poder usar la piscina”, alerta la vecina María Isabel González.

Dolores Valverde, que también acudió ayer a manifestar su apoyo a los trabajadores, es una usuaria que teme “que vayan recortando horas y acaben cerrando la piscina para siempre”. Las usuarias lamentan también distintos problemas de mantenimiento en las instalaciones.

El bipartito mantiene el silencio a la espera de los informes jurídicos

El delegado de personal y monitor multidisciplinar, Miguel Pena, explicó ayer que el conflicto colectivo empezó por la exigencia de subida de los salarios al IPC. “Fue entonces cuando dijeron que deberían reducir un 20% el gasto de personal. Afecta a la mitad de la plantilla. Nosotros entendemos el incremento de gastos por la subida de la energía, pero la empresa no aludió a esa explicación cuando planteó reducirnos las horas”, añade. Asegura que “a jornada completa hay solo dos monitores. El resto tienen entre 20 y 30 horas a la semana”.

La protesta se trasladó a la Casa Consistorial.

La protesta se trasladó a la Casa Consistorial. / GONZALO NUÑEZ

Más de 800 abonados

La piscina de Moaña y su gimnasio anexo cuentan ahora con más de 800 usuarios. “La empresa argumenta que son necesarios 1.600 para que sea rentable. En los momentos con más afluencia, en los primeros años, había unos 1.300 clientes”, aclara la representación sindical de la plantilla.

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