“Tristes por la niebla, pero alegres porque la caza es nuestro hobby y la estábamos esperando como agua de mayo”, asegura José María Costa Pena, presidente de los cazadores de Moaña, que añade que, como en otras temporadas, en el primer día de ayer se demostró que la caza sigue escasa. Reconoce que en las zonas altas del monte había mucha niebla que no permitía ver las piezas y que en las zonas bajas, en donde había más visibilidad, la población de conejo escasea. Se repitió la misma valoración del año pasado en la apertura de la temporada, en una jornada marcada por la niebla y la escasez de conejo.
Loz cazadores mostraban también ayer mucha decepción por la situación de los montes, que siguen sin limpiar y están llenos de una maleza, que les dificulta la práctica de la actividad cinegética.
Muchos de ellos huían ayer de ser fotografiados porque temen recibir muchas críticas por parte de los animalistas, aunque reconocen que ellos aman el monte y verlo en este estado les entristece. La mala imagen de la caza es algo que se está arrastrando desde hace unos años y se refleja en las sociedades que van perdiendo socios.
En Cangas, de más de cien que había antes, ahora hay unos 70 y no todos acuden al monte. Algunos lo hacen solo con perros, sin escopeta, como es el caso del presidente de los cazadores locales, Jesús Graña. Lo hizo en Donón. La normativa les limita a 4 perros por cazador y nunca más de 12 por grupo. Los grupos son de 6 cazadores máximo, por lo que más de 3 cazadores no pueden exceder de 12 perros.
En la jornada de ayer se podía cazar conejo y también jabalí, que se puede abatir los domingos, asegura Graña. En su Tecor (Territorio cinegéticamente ordenado) de Cangas cayó alguna buena pieza en la zona de Coiro, en donde el cerdo salvaje sigue siendo un problema por los daños que causa en las fincas y también un peligro para los vehículos que circulan por las carreteras. Ayer, precisamente, un conductor se cruzaba con cuatro crías de jabalí en la carretera que va de A Magalena a Coiro, justo antes del vial de San Cosme. El conductor tuvo que parar al meterse las crías y cruzar la carretera.
Ayer entre los cazadores no se hablaba de la nueva ley animalista, a la que el PSOE ha presentado una enmienda para que se excluyan a los perros de caza, y que ha generado protestas de animalistas, que dicen que todos los perros por igual tienen que estar protegidos por la Ley de protección animal.
