Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El astillero A Xunqueira debe decidir si readmite a los cinco trabajadores despedidos

La plantilla inició una huelga con concentraciones ante la nave en Meira | Desbloqueará la situación si vuelven los compañeros | Parcero insiste en que no hay dinero

El representante sindical (centro) y trabajadores entran a la reunión con el empresario. | // S.Á.

Trabajadores del astillero Industrias Navales A Xunqueira Inax, en Meira, comenzaron ayer una huelga para reclamar el pago de los salarios atrasados que les adeuda la empresa, en el mayor de los casos arrastrados desde hace casi seis meses y en el menor, de uno, y para reclamar la readmisión de cinco operarios, despedidos el miércoles de la semana pasada alegando falta de cartera de pedidos. La plantilla, integrada por 16 trabajadores, condiciona el fin de la huelga a la readmisión de los cinco compañeros, como así se lo propusieron ayer en una reunión con el empresario, Manuel Parcero.

La huelga comenzó con una concentración de media docena de trabajadores, a las 6:30 horas, en la entrada al astillero, que permaneció cerrado toda la jornada. Portaban pancartas alusivas al conflicto: “Queremos cobrar os salarios”. Una patrulla de la Guardia Civil se desplazó hasta el lugar, pero no se registraron incidentes. Fue una concentración pacífica, que se prolongó desde las 6:30 hasta las 10:30 y se retomó a las 16:00 horas, cuando estaba prevista la reunión de representantes de la plantilla y del sindicato CUT, con el empresario, para retirarse todos ellos a las 17:00 horas.

Una imagen de archivo del astillero de A Xunqueira Inax. | S.Á.

A esa cita acudieron el asesor e histórico sindicalista de la CUT, Manuel Camaño; y tres trabajadores. Uno de los operarios despedidos es afiliado de toda la vida al sindicato y es uno a los que la empresa adeuda unos 4 meses de nómina.

Por parte de la empresa solo acudió Manuel Parcero y no se prolongó más de media hora, asegura Camaño. El empresario, muy conocido en el mundo de la reparación y construcción naval de Moaña, declinó realizar manifestaciones.

El sindicalista asegura que el empresario sigue manifestando lo mismo, que no hay dinero, que no le pagan y que la cartera de pedidos se aflojó. Durante la reunión, Parcero confirmó que sí había gestiones en los últimos meses para la venta del astillero, pero no puso sobre la mesa ninguna propuesta en concreto que diera confianza a los trabajadores, ni informó de la cartera de pedidos. Camaño asegura que quedaron emplazados para hoy a una nueva reunión a partir del mediodía tras el encuentro que mantendrán a las 11:00 horas con la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos, en el Concello.

Sindicalista y trabajadores trasladaron al empresario una propuesta de desbloquear la situación condicionada a la readmisión de los cinco compañeros despedidos, algunos de ellos con una antigüedad de 8 años y tres en situación de baja laboral. “No vamos a desconvocar el paro a no ser que haya un acuerdo en este sentido”, insiste Camaño.

Parcero lleva meses envuelto en una situación de mucha presión, por un lado económica y, por otro, por lo que él califica de persecución hacia su empresa desde que se vio envuelta en un operativo de la Guardia Civil contra la construcción de narcolanchas en las Rías Baixas. En esa operación, desarrollada en abril bajo el nombre de “Keromán y Samario”, la Guardia Civil realizó un registro sorpresa de la nave pero no se encontró nada. Unos meses antes había ardido en el mar frente al astillero una narcolancha cargada con dos motores de mucha potencia y garrafas de combustible, supuestamente para acudir a una descarga, pero nunca se vinculó a esta industria. De esta situación, nada se habló en la reunión y Camaño asegura que tampoco quiere saberlo.

En el año 2020, la empresa arrojaba unas pérdidas de 404.698 euros. Fue el año del COVID y la empresa también figura acogida a la línea de créditos ICO por el coronavirus por importe de 475.000 euros.

Compartir el artículo

stats