El periodo de pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) se abre a partir de mañana en el Concello de Bueu, tanto para las propiedades de carácter urbano como rústico. Este gravamen es el que reporta mayores ingresos a la administración municipal y este año el padrón incluso ha crecido debido a la regularización practicada en 2021 por la Dirección General del Catastro. En concreto se pasarán al cobro casi 10.700 recibos, que son casi 1.640 más que en el ejercicio anterior, y el importe total asciende a 1.667.322 euros, lo que significa un aumento de 120.700 euros con respecto al año pasado.
La regularización catastral del año 2021 está vinculada a la aprobación del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), que significó una modificación en los valores de los inmuebles. Este proceso comprende una regularización de los últimos cuatro ejercicios y el año pasado significó unos ingresos a mayores de unos 400.000 euros para el Concello de Bueu, tal como explican desde el gobierno local.
Esa revisión concluyó hace meses y ahora es posible conocer su impacto sobre el padrón anual del IBI. El censo pasa de los 9.350 recibos de 2021 a casi 10.700 en este año 2022. Un estirón que también se nota en la recaudación prevista, que sube de 1.546.548 euros a 1.667.322 euros, según los datos de la Tesorería municipal.
En el año 2021 el periodo de cobro de este recibo en vía voluntaria rozó el 94%, lo que significó el ingreso de caso 1.450.000 euros. La demora en el abono del impuesto implica la puesta en marcha de la vía ejecutiva, que puede conllevar un recargo del 5%, 10% o hasta el 20% sobre el importe inicial del recibo. El calendario del contribuyente aprobado este año por el Concello de Bueu establece que el plazo para abonar el IBI concluye el próximo 31 de agosto.
En el caso del IBI de rústica las cifras son mucho más modestas. El número total de liquidaciones previstas no llegan a las 145 y el importe total de esos recibos no alcanzan siquiera los 2.000 euros, según los datos municipales.
