Ya lo dice el refrán: Dios aprieta, pero no ahoga. Y así fue durante este fin de semana en el que las alfombras del Corpus Christi regresaban a las calles de O Morrazo. Los alfombristas trabajaron con la constante amenaza de la lluvia, que hizo acto de aparición con distintos grados de intensidad durante la noche del sábado y en la madrugada y mañana del domingo. Pero esa lluvia no consiguió ahogar la ilusión ni las ganas de los cientos vecinos que deseaban recuperar esta hermosa tradición. Al final los alfombristas ganaron el pulso y esa lluvia que vino del cielo sirvió para bendecir sus diseños y trabajo.
El mayor despliegue se vivió en Bueu, donde las alfombras florales tienen la consideración de Festa de Interese Turístico de Galicia. Es verdad que este año no hubo tantos tapices como en ocasiones precedentes y que en algunos lugares, sobre todo en la calle Pazos Fontenla, había más asfalto que flores, pero eso no empaña la entrega y la dedicación de los alfombristas. “Hay que destacar el esfuerzo que está realizando todo el mundo para echarse a la calle a confeccionar las alfombras a pesar de las circunstancias y, especialmente, la participación de los más pequeños”, destacaban desde la Asociación Cunchas e Flores de Bueu.
Quizás la zona más llamativa era la calle peatonal Eduardo Vincenti, que estaba prácticamente cubierta de principio a fin con una gran variedad de diseños: las banderas azules de las playas de Bueu y las ánforas de San Martiño; diseños que incluían papiroflexia; un San Judas Tadeo; un homenaje a la figura de Manuel Omil o la alfombra de 20 metros de longitud de la Asociación Alfombras Corpus Bueu, que se sobrepuso al reciente robo de material denunciado ante la Guardia Civil. “Es un diseño de Xulio Formoso y es un tapiz con otras alfombras dentro”, explicaba su presidenta, Carmen Santos. Este diseño incluía además una réplica exacta del Custodio de la iglesia de Bueu.
Las alfombras también ganaban protagonismo en otros puntos, como en el entorno del Museo Massó o en el centro del barrio de Banda do Río, que volvió a ser un derroche de imaginación. Motivos religiosos, florales, referencias a la conservera de Massó o incluso a Rigoberta Bandini y su “Ay mamá”. Tampoco podía faltar una alusión al dichoso coronavirus y el mejor ejemplo era un manto que representaba un guante de boxeo lanzando un puñetazo al COVID. ¡Ojalá lo dejase KO!
En la calle Pazos Fontenla destacaban las novedosas alfombras verticales elaboradas por Ataúlfo Cortizo en la fachada de un grupo de las viviendas sociales; el enorme fondo marino en el que se podían distinguir calamares, lenguados, maragotas, pintos, navajas...; la alusión al Camino de Santiago del colegio Virxe Milagrosa o la alfombra con la que el ANPA del colegio de Montemogos celebró el 50 aniversario del centro educativo. Incluso montaron una carpa para poder trabajar a resguardo de la lluvia y ayer a mediodía su diseño ya lucía espléndido delante de la Librería Miranda.
La procesión en Bueu salió después de la misa solemne de las 18.00 horas en la iglesia de San Martiño y la primera alfombra estaba precisamente a las puertas del templo, elaborada por el Colectivo de Alfombristas Independientes de Bueu.
El mal tiempo recluye las alfombras de San Martiño
En Moaña las procesiones recorrieron, a primera hora de la tarde, los entornos de la iglesia de San Martiño, en el núcleo original de la villa, y de O Carme, en el casco urbano. En el primer caso, la Asociación de Alfombristas San Martiño no pudo cumplir su deseo de extender alfombras florales hasta el cruceiro y decorar así todo el trayecto de la procesión. Debido a las intensas lluvias de la mañana tuvieron que centrar su creación en el pasillo central del templo románico. A los pies del altar, una bella creación artística mostraba la Sagrada Familia en tonos azules, rodeada por dos ángeles y con un marco en tonos rojizos. El resto del corredor central fue decorado con flores de colores blanco, amarillo, rosa y azul, unidas hasta la salida por el pórtico principal.
En O Carme las alfombristas apuraron los ratos sin lluvia para extender una bella alfombra en tonos azules y violetas con figuras geométricas y el texto “Corpus 2022”. La procesión, en este caso, estuvo acompañada por varios gaiteiros y recorrió un tramo de la calle Ramón Cabanillas y otro de Concepción Arenal, con la Policía Local desviando el tráfico al paso de los fieles.
Tregua meteorológica en Cangas
En Cangas, la meteorología dio una tregua para permitir la confección y visitas a las alfombras durante la tarde, antes de que sucumbieran al paso de la procesión tras la misa en la excolegiata, ante cuya fachada se extendió un manto floral y de otros materiales con motivos religiosos y se instaló un puesto de venta de imágenes votivas.
Además, se levantaron cinco altares en el ámbito del casco histórico, como la intersección de la calle San Xosé con Benigno Soage, Manuel Graña, Praza da Constitución y los eirados de O Costal y O Señal, con las calles adyacentes también sembradas con alfombras ornamentales.