El fútbol a pie demostró ayer en Cangas su capacidad de convocatoria y su gen intergeneracional. En el Trofeo Concello de Cangas hubo equipos en los que jugaban el abuelo, el padre y el nieto. También hubo equipos de padres e hijos y de madres e hijas. El equipo ganador fue Inmoviliaria Villaverde, el premio Claudio González fue para la jugadora Rebeca y el jugador Marquiños. Rafa Oliveira, con 80 años, fue el mayor de los participantes. El fin de fiesta estuvo amenizado por el Gimnasio Di Som. Se vivió una gran fiesta de esta modalidad que gana adeptos día a día.