Un día después del incendio que arrasó las instalaciones de Poliésteres Sobral, en el polígono industrial de Castiñeiras, la Guardia Civil pudo acceder al interior de la nave. Hasta el lugar se desplazó desde A Coruña un equipo del instituto armado especializado en este tipo de sucesos y se espera que en los próximos días puedan completar un informe en el que se detallen las causas del suceso. Mientras tanto, el propietario de la nave ha comenzado a recibir muestras y gestos de apoyo y solidaridad, tanto de los clientes y proveedores como de otras empresas del sector. “Me han llamado varios empresarios para ofrecernos parte de sus instalaciones para que podamos trabajar”, reconocía el responsable de Poliésteres Sobral, Jorge Sobral.
El incendio comenzó poco después de las cinco de la madrugada del martes y quemó por completo las instalaciones. Los bomberos consiguieron extinguir el fuego poco antes de las ocho de la mañana, pero hubo que esperar más de un día para poder entrar a la nave debido a la elevada temperatura del interior. Durante la tarde del martes los Bombeiros do Morrazo acudieron de nuevo al lugar para refrescar el lugar y durante la mañana de ayer los agentes de la Guardia Civil del grupo especializado en incendios pudieron entrar a inspeccionar la nave, situada en la parcela 18 del polígono de Castiñeiras, tal como confirmaron desde la propiedad.
De momento no se atreven a apuntar las posibles causas de un incendio que obligará a reconstruir íntegramente la nave. La estructura no llegó a colapsar totalmente, pero es totalmente irrecuperable y será necesario proceder a su derribo. “Esto va ir para largo”, reconocía ayer Jorge Sobral.
El empresario, natural de Marín, se mostraba agradecido por las numerosas llamadas recibidas después del suceso. Entre ellas destacan las de otras empresas del sector que se han puesto a su disposición para que pueda emplear parte de sus instalaciones para trabajar y atender los pedidos de los clientes. Unos clientes que también se pusieron en contacto con Sobral para mantener su confianza y compromiso. “Estamos muy agradecidos porque llamó mucha gente para ayudar de manera desinteresada. En los próximos días estudiaremos las opciones y decidiremos qué hacer”, manifestaba ayer el empresario.
25 empleos
Poliésteres Sobral es una empresa con 25 años de historia, cuya localización original estaba en el ayuntamiento de Marín. Hace ya una década se instaló en una parcela de la segunda fase del polígono de Castiñeiras y en la actualidad tiene a unas 25 personas empleadas. La compañía está especialmente orientada al sector de la automoción a través del diseño, desarrollo, fabricación y suministro de piezas de poliéster reforzado y fibra de vidrio. Entre sus clientes hay empresas dedicadas a la fabricación de carrocerías de las provincias de Pontevedra, Ourense y A Coruña.
