La campaña de ayuda humanitaria a favor del pueblo de Ucrania, iniciada por el Concello de Cangas a instancias del ucraniano afincado en el municipio desde hace 18 años Vitaliy Dovhanyk y su mujer Rebeca Nores, está teniendo una gran acogida. En el primer día, ayer, la Casa da Xuventude se llenó con las donaciones que desde primeras horas de la mañana fueron entregando particulares, consistentes en alimentos no perecederos, productos de higiene y sanitarios, entre otros. Todo se entrega a la Asociación Solidaridade San Roque de Salvaterra do Miñlo, que se encarga de su envío.

Vitaliy Dovhanyk entraba ayer emocionado en la Casa da Xuventude de Cangas, en donde una de las salas de la oficina Municipal de Voluntariado se llenó en pocas horas con las donaciones de particulares con alimentos no perecederos y productos de higiene, que se pidió desde el Concello de Cangas en una campaña iniciada a instancias de este vecino ucraniano y de su mujer canguesa Rebeca Nores. La responsable de la oficina de Voluntariado también mostraba su entusiasmo con la respuesta del pueblo cangués para ayudar, dentro de sus posibilidades, a las familias de Ucrania damnificadas por la guerra desatada por Rusia.

Todos los productos se envían a la Asociación Solidaridade San Roque de Salvaterra do Miño, que desde hace años coordina Marisol Pino con su marido ucraniano Petro Knyzhnyk, y a través de la cual ya se han enviado a lo largo de los últimos 13 años varios camiones con ayuda humanitaria y material sanitario para mitigar las carencias sanitarias en el país, cuando todavía se estaba lejos de esta guerra, que nadie se esperaba que fuera a estallar. Dovhanyk, que derrocha capacidad de diálogo y amabilidad, asegura que, igual que nadie se esperaba eta guerra, quizás nadie se espere una bomba atómica. Él sí.

"La televisión ucraniana ofrece noticias esperanzadoras de batallas ganadas a los carros de combate rusos"

Vitaliy Dovhanyk - Ucraniano afincado en Cangas

En su casa de Cangas está conectado a la televisión ucraniana, a través de una parabólica que instaló hace tiempo y a través de internet. Asegura que ofrece noticias esperanzadoras de batallas ganadas a carros de combate rusos, no tan centradas en los avances de Rusia sobre Ucrania como ofrecen los canales europeos. Vitaliy emigró de su país hace algo más de 18 años con destino a Portugal, en donde el país había abierto las fronteras para la entrada de migrantes ucranianos. Allí conoció a su mujer que trabajaba de restauradora en las mismas obras de una plaza, en las que él trabajaba con las piedras. Al cabo de unos años se asentaron en Cangas, en donde el matrimonio tiene un hijo y en donde reside desde hace 18 años. Ambos conocen Ucrania y aseguran que el problema está en la excesiva corrupción.

Desde la Oficina de Voluntariado aseguran que ya el sábado partieron las primeras donaciones desde Cangas, con conservas de la empresa Lago Paganini y pañales y productos de higiene entregados por un particular. Protección Civil se encargó de su traslado a la Asociación de Solidaridade San Roque de Salvaterra do Miño, que está canalizando envíos desde Galicia seleccionando las donaciones, según las necesidades del momento. Para Vitaliy es una asociación que le ofrece todas las garantías.

Productos que se recogen

En Voluntariado recuerdan que las personas pueden ayudar también con una donación económica para los gastos de transporte, a través de la cuenta de la Asociación Solidaridade de San Roque G36591832 “concepto Morrazo” ES·38 2080 5434 0030 4011 1304. También se puede ayudar con el empaquetado de las donaciones y logística para trasladar a los puntos de recogida, para lo cual se puede contactar en la Oficina Municipal de Voluntariado 986 392171 o a través del correo electrónico voluntariado@cangas.gal. Los productos que se pueden donar en alimentación son conservas en lata, comida deshidratada, barras energéticas, chocolate, leche en polvo y alimentación para bebés, sin incluir botes de vidrio. En higiene, pañales para bebés y adultos, toallitas, higiene femenina o cuchillas de afeitar. En material sanitario: betadine, vendas, agua oxigenada o alcohol,. gasas, esparadrapo o algodón. También se pueden donar calcetines térmicos, de las tallas 40 a 47; guantes de obra reforzados, linternas, pilas, sacos de dormir térmicos, esterillas o mantas térmicas.

Marisol Pino revisa los colchones que se van a enviar a la población ucraniana.

Marisol Pino revisa los colchones que se van a enviar a la población ucraniana. Fdv

“El día 10 mandamos el primer camión a Polonia con 100 colchones, mantas, pañales y comida”

En Salvaterra do Miño, Marisol Pino y su marido ucraniano Petro Knyzhnyk, responsables de la Asociación Solidaridade San Roque estaban ayer agotados, incluso saturados, de tantas donaciones con destino a la población ucraniana que están recibiendo desde diferentes puntos de Galicia, incluso del país, a través de amigos que tienen en Madrid. Todos los productos se están guardando en una nave de la familia de Marisol Pino, que antes era una discoteca, y una vez revisados, clasificados y empaquetados, se trasladan al centro cultural de Leirado. Marisol Pino asegura que el próximo día 10 está previsto que parta el primer camión con 17 toneladas de ayuda humanitaria con destino a Polonia, para repartir entre los ucranianos refugiados.

El camión irá lleno con 100 colchones, 300 mantas, otros 300 juegos de cama, pañales de bebés y de adultos, agua, leche, papillas para bebés y los lotes de conservas que desde Cangas ha donado la empresa Lago Paganini. Las gestiones para la contratación del camión la llevan a cabo ucranianos afincados en Valença, en Portugal.

Donaciones que guarda la Asociación Solidaridade San Roque en Salvaterra do Miño.

Donaciones que guarda la Asociación Solidaridade San Roque en Salvaterra do Miño.

Marisol Pino asegura que conoció a su marido en los Hermanos Misioneros de Teis. Llegó a Galicia desde Portugal a donde había emigrado para trabajar. Llevan en activo con la Asociación Solidaridade San Roque desde 2008 y a lo largo de todos estos años han llevado unos 12 camiones de ayuda humanitaria al país, contando con una asociación allí que recibe los cargamentos. Señala que la asociación tiene ahora unos 200 socios. La última que fueron con ayuda fue en 2015 y después todo se paró con la pandemia del COVID.