En un discreto segundo plano, la conselleira de Mar, Rosa Quintana, participó esta tarde en Cangas en el sepelio de los dos marineros peruanos, que residían en la localidad y que fallecieron en el naufragio del pesquero "Villa de Pitanxo". Los cuerpos de Daniel More Valladares y de su sobrino Diego More Vega salieron del tanatorio de Cangas en sendos coches fúnebres, acompañados por un tercero lleno de flores, en dirección a la excolegiata de Cangas, en donde tuvo lugar el funeral que ofició el párroco Severo Lobato y el titular de Coiro, Benito de la Iglesia, en cuyo cementerio parroquial fueron enterrados, posteriormente, los dos tripulantes.
Además de Rosa Quintana, estaba también Lino Sexto, subdirector de Guardacostas y Mercedes Rodríguez, directora xeral de Pesca, así como la alcaldesa de Cangas, Victoria Portas; concejales de la corporación entre ellos la edil Aurora Prieto (ACE), Pío Millán (PP) y Eugenio González y Pilar Nogueira (PSOE) además de el patrón mayor cangués, Javier Costa. Por su parte, la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos, con los ediles Aldán Santamarina y Odilo Barreiro, se desplazaron al cementerio de Coiro.
Hasta Cangas se desplazó un nutrido grupo de la comunidad peruana de Vigo, Marín y Pontevedra. Una emotiva madre de uno de los fallecidos se abrazaba al féretro de su hijo nada más entrar en la iglesia. Los cuerpos fueron portados por familiares. Ante la fachada de la excolegiata, cuando los féretros entraban en los coches fúnebres camino del cementerio, la mujer de uno de los desaparecidos de Pontevedra Jonathan Calderón Ortiz, Carolina Alcántara, fue a buscar a la conselleira para fundirse con ella en un abrazo.
