La parroquia de Beluso, en el Concello de Bueu, acogió ayer el entierro del primero de los náufragos del “Villa de Pitanxo”, que se hundió el pasado martes en Terranova. La familia del cocinero Fernando Santomé Ferradás “Nando” pudo despedir al tripulante del pesquero, acompañada por numerosos vecinos y allegados que acudieron a dar su último adiós al marinero y a arropar con un abrazo solidario y de esperanza a los familiares, tal como ejemplificó durante la homilía el sacerdote encargado de oficiar el funeral. Mañana jueves está previsto el sepelio de dos de los marineros peruanos afincados en Cangas: Daniel More Valladares y su sobrino Diego More Vega, cuya familia de Perú tenía previsto llegar entre ayer y hoy a Galicia. Los dos tripulantes de Cangas que lograron sobrevivir en el naufragio, el patrón Juan Padín y su sobrino Eduardo Rial, salieron ayer muy temprano de sus viviendas para reunirse con el armador y fue imposible ponerse en contacto con ellos. Sus familiares más cercanos solicitaban que se les dejase descansar y recuperarse. “Lo único que pedimos es que sigan buscando al resto de sus compañeros”, decía Gloria, hermana del patrón y madre de Eduardo Rial.
Los supervivientes y los cuerpos de los fallecidos llegaron al aeropuerto de Santiago pasada la medianoche del lunes al martes. La funeraria Albia, con presencia a nivel nacional, fue la encargada de coordinar con la naviera todo el protocolo y traslado de los cuerpos para descargar a las familias. El del cocinero de Bueu fue trasladado directamente al tanatorio del municipio, donde se pudo velar desde primera hora de la mañana. Los cuerpos de Daniel More y Diego More permanecían ayer aún en Pontevedra y está previsto que hoy a mediodía lleguen a Cangas, donde serán velados hasta mañana. Esta decisión se adoptó para que sus familiares en Perú dispusiesen de tiempo para poder viajar y llegar a Galicia para el entierro, que será en el cementerio de Coiro. La comitiva fúnebre saldrá a las 16.45 horas desde el tanatorio y se dirigirá en primer lugar hacia la excolegiata de Cangas, donde está previsto que se oficie el funeral.
A lo largo de la jornada pasaron numerosos vecinos por el tanatorio de Bueu y representantes políticos para ofrecer el pésame a la familia de Fernando Santomé Ferradás. Entre ellos estaba la conselleira de Mar, Rosa Quintana; el alcalde de Bueu, Félix Juncal; y representantes del resto de grupos políticos, como Elena Estévez (PP), José Manuel Vilas (PSOE) o el vicealcalde, Julio Villanueva (ACB). La mayoría, junto a otros concejales de la corporación acudieron al entierro y posterior funeral, en el que también estaba el patrón mayor de la Confraría de Pescadores de Bueu, José Manuel Rosas. Los familiares del cocinero de “Villa de Pitanxo” se encargaron de portar su féretro a hombros para trasladarlo al panteón.
Durante la posterior homilía el sacerdote tuvo palabras de cariño y consuelo hacia la familia de Fernando Santomé Ferradás y destacó la respuesta solidaria de los vecinos de Bueu, una localidad con una estrecha y fuerte vinculación con el mar. “La gente del mar sois de alguna manera una cátedra para todos nosotros. El mar es el elemento que nos rodea y está muy presente aquí. Por eso de alguna manera aún os sentís más solidarios”, alabó durante su sermón en la iglesia parroquial de Beluso.
Las fuentes consultadas explican que entre las personas que pasaron a lo largo del día por el tanatorio de Bueu estaba el marinero de Ghana Samuel Kwesi, uno de los tres supervivientes del “Villa de Pitanxo”, y que también quiso dar el pésame a la familia de su compañero de tripulación. Tanto Kwesi como los otros dos supervivientes estaban citados ayer por la empresa armadora Pesquerías Nores en Marín. Las familias de Juan Padín y Eduardo Rial aseguraron que ambos salieron a primera hora de la mañana para reunirse con los responsables de la compañía y, al cierre de esta edición, no habían regresado a la aldea de Donón ni fue posible hablar con ellos.
Los dos marineros peruanos afincados en Cangas serán enterrados mañana en el cementerio de Coiro, en un panteón propiedad del Concello de Cangas y que se puso a disposición de las familias. Los padres del joven Diego More tenían previsto llegar ayer a Galicia y hoy está previsto que lleguen más familiares.
En este caso la tragedia es doble porque fallecieron tanto él como su tío, Daniel More. Desde el Apostolado del Mar Stella Maris en Vigo recibieron la petición de ayuda de las familias y comenzaron a gestionar fórmulas de colaboración entre los benefactores de la asociación. La compañía aérea Iberia realizó un importante descuento en los billetes de avión a los familiares de los marineros peruanos para facilitar su viaje a España y desde Stella Maris destacan también la respuesta “auténtica” y “solidaria” de las familias con marineros embarcados en distintos caladeros de altura.
Por otro lado, fuentes de las familias peruanas aseguraron que dos de los marineros fallecidos que quedaron en Canadá deberán permanecer entre siete y diez días en este país porque se comprobó que tenían COVID-19. Estas familias aseguran que al menos dos de los tripulantes españoles que ya fueron repatriados también tenían el coronavirus. Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores manifestaron ayer que durante las gestiones para la repatriación “se cumplieron todos los trámites administrativos y burocráticos necesarios y su traslado se ajustó a todos los requisitos previstos por la ley”.
Uno de los hijos del moañés que se encuentra desaparecido, Fernando González, acudió ayer al Parlamento gallego en compañía de la alcaldesa, Leticia Santos, para escuchar el texto de condolencias institucional de todos los grupos de la cámara. Kevin González también fue recibido por los grupos y por el presidente del Parlamento.
La noche anterior Kevin González acudió también a la llegada de los supervivientes con la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. “Nos prometió que la flota pesquera retomaría la búsqueda y solicitamos ayudas para esos barcos y que puedan dedicar varias jornadas a estos trabajos. Además el Gobierno está gestionando la forma de acceder al buque tanto con medios privados como negociando con países que tengan esa capacidad”.
El moañés señala que las familias dan un voto de confianza a estas promesas del líder del ejecutivo central “pero sí que le pedimos a todos los partidos que liberen a las familias de la carga de tener que exigir que siga la búsqueda. Nosotros no sabemos sobre los trámites burocráticos necesarios y lo que debemos hacer es esperar para recibir a nuestros familiares”.
A nivel personal, Kevin González explica que pasó un fin de semana “muy duro y desconectado” pero ayer se veía “con fuerzas” para intentar que el cuerpo de su padre vuelva a Moaña.
