Los pantalanes reservados a los barcos de la pesca profesional en Bueu están a punto de recuperar el suministro de agua y luz, unos servicios que Portos de Galicia cortó el pasado mes de mayo por falta de pago. La cofradía asumirá ahora la titularidad para que el sector pueda disponer nuevamente de unos servicios básicos para su actividad y mantenimiento de las embarcaciones, aunque en los próximos días se convocará a los armadores para valorar cómo se financiará la dotación.
El pósito quiere esperar a que toda la instalación esté completa y plenamente operativa, ya que en los últimos días se registraron una serie de actos vandálicos que han demorado su puesta en marcha. “Alguien se llevó los grifos del pantalán de Beluso, por lo que el servicio de agua no está totalmente restablecido”, se lamentaba el patrón mayor de Bueu, José Manuel Rosas. En el caso de los pantalanes de Bueu resta por colocar las cajas de los contadores, que deben incorporar un mecanismo para poder cerrarlas. En cuanto todo esté listo la intención de la cofradía es reunir a los armadores y estudiar alternativas para afrontar el coste de estos dos suministros. Esa reunión estaba prevista inicialmente para finales de esta semana, pero los últimos problemas han obligado al patrón mayor a posponerla unos días.
El corte de abastecimiento y electricidad en los dos pantalanes de Bueu y en el de Beluso se produjo en el mes de mayo, sin previo aviso y provocó malestar entre el sector de la tercera lista. No obstante, Rosas admite que Bueu era prácticamente una excepción en el mapa de puertos de titularidad autonómica. El ente público Portos de Galicia llevaba tiempo advirtiendo de que había que encontrar una fórmula para repercutir el coste del suministro entre los usuarios y que no estaba dispuesto a seguir asumiendo esos conceptos. La factura anual podría rondar aproximadamente los 2.000 euros por pantalán.
Nada más producirse la interrupción en el suministro la cofradía convocó a los propietarios de los barcos para estudiar cómo recuperar el servicio. Una de las opciones que se barajaba era dotar a cada armador de una tarjeta electrónica y que pagase en función de su consumo real. Sin embargo, no es la única opción que está encima de la mesa y la solución definitiva se adoptará en los próximos días.
Durante estos meses los barcos que necesitaban puntualmente alguno de estos suministros, especialmente el de electricidad, optaban por acercarse hasta la explanada de varada del puerto.
No es el único coste que deberá afrontar el sector. A partir de ahora también tendrán que abonar las tasas correspondientes por apilar los aparejos y artes de pesca en las zonas de tránsito portuarias. Las cofradías de la provincia de Pontevedra eran las únicas de Galicia que no abonaban estas tarifas que consideraban “abusivas”, pero desde ahora sí lo harán gracias al acuerdo con Portos de Galicia. La Federación Provincial logró que a partir del 1 de enero se apliquen una serie de bonificaciones que llegarán hasta el 80%.
