Los problemas derivados de los vertidos de aguas fecales se agolpan en el litoral cangués, que ya había tenido graves problemas en agosto. Esta misma mañana efectivos de la Policía Local y de Protección Civil se encuentran en el arenal de Menduíña, en Aldán, ordenando también el izado de la bandera roja y que los socorristas prohíban el baño a todos los usuarios, al igual que ocurrió ayer en Rodeira, en donde se mantiene la prohibición.

La bandera roja, ondeando en Menduíña. /G.N.

En el caso de Menduíña, estuvo sin socorristas las dos últimas jornadas por el mal tiempo, todo apunta a que los problemas se remontan a las intensas lluvias del jueves, que habrían habría desbordado el bombeo de la zona arrojando las aguas fecales al mar. La arena amaneció hoy con restos visibles. De momento el cierre no afecta a las otras playas de Aldán.