Bombeiros do Morrazo, Policía Local de Bueu, Guardia Civil y una ambulancia del 061 tuvieron que intervenir en un operativo conjunto para rescatar a una mujer que había caído en el interior de una cuba de la antigua salazón de Mourisca, situada junto a la playa del mismo nombre, y que actualmente tiene el uso de vivienda particular.

El suceso se produjo alrededor de las 19.30 horas del martes cuando la afectada se encontraba limpiando la cuba. Fue entonces cuando de forma accidental se cayó dentro de la misma, a una profundidad de unos dos metros. Las heridas que sufrió a causa de la caída impidieron que pudiese salir por sus propios medios, por lo que se llamó al 112 y este puso en alerta a las fuerzas de seguridad y a la ambulancia. Sin embargo, y tras unos primeros intentos, se optó por dar aviso a Bombeiros do Morrazo, que se personó posteriormente en el lugar de los hechos.

Los Bombeiros tuvieron que intervenir para extraerla del pozo, de dos metros de profundidad

Los bomberos enviaron una brigada que permitió la salida de la mujer herida en camilla y posteriormente se ocuparon en el 061 para trasladarla a un centro médica a fin de reconocerla y emitir un diagnóstico de sus heridas.

La antigua salazón de Mourisca forma parte de una vivienda familiar después de que hace años sus propietarios acometiesen una ambiciosa rehabilitación de las instalaciones, que se valoró inicialmente en unos 450.000 euros. El complejo, uno de los mejor conservados de los casi treinta que tuvo Bueu en su costa, llegó a ser utilizado anteriormente incluso como chiringuito. La intención de los dueños era musealizar las instalaciones y que acogiesen visitas y actividades de diverso tipo. También se apuntó en su momento la posibilidad de darle uso turístico a parte del recinto, algo que no cuajó por los obstáculos institucionales.

Una mujer fue evacuada de Ons con una fractura en la pierna

Por otra parte, la Salvamar Mirach tuvo que intervenir en la tarde de ayer en la Illa de Ons para trasladar a una mujer que se encontraba en el archipiélago y que sufrió una fractura en su pierna izquierda. La herida fue atendida inicialmente por los sanitarios y el personal del Parque Illas Atlánticas, que decretaron que era necesario su traslado a tierra firme. Por ello se la trasladó primero al muelle y luego fue la Salvamar Mirach la que la desembarcó en Bueu para derivarla a un centro hospitalario.