Indignada. Así se muestra la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos, con el comportamiento de determinada juventud que participó en los botellones y protagonizó peleas en torno a las fiestas del Carmen de la localidad, este pasado fin de semana, sobre todo, en la noche del sábado y del domingo. Muestra su malestar también con la falta de apoyo de la Subdelegación del Gobierno, a la que el Concello había pedido, por escrito, el apoyo de la Guardia Civil como refuerzo a la Policía Local, pero solo estuvo en la noche del viernes al sábado. El Concello había acordado reforzar el servicio con dos patrullas. La regidora trasladó ayer su malestar a la Subdelegación con la esperanza de que no vuelva a ocurrir.

El Concello había pedido el pasado día 13 a la Subdelegación este refuerzo para los días de las fíestas -15, 16 y 17-. Asegura que la noche del 15 fue tranquila, el 16 ya empezó a haber botellón fuera del recinto acotado debidamente para la fiesta y las atracciones, y con la ayuda de la Guardia Civil, con un importante trabajo, la Policía logró disuadirlo. Pero el problema más grave -explica, estuvo en la noche del sábado, en la que a pesar de haber solicitado el refuerzo, no hubo Guardia Civil y la Policía Local se quedó sola para disuadir a un enorme grupo de gente que acabó bebiendo descontrolada en la zona del paseo y dentro del parque infantil, peleando, provocando destrozos y actos vandálicos “que pudieron haberse evitado como en la noche anterior, si la Guardia Civil cumpliera con su refuerzo”.

Imagen del botellón en las fiestas del Carmen de Moaña. FdV

Junta de portavoces urgente

Atendiendo la petición del concejal independiente de XM, Javier Carro, la alcaldesa convocó a final de la mañana una reunión de los portavoces de los grupos políticos con el jefe de la Policía Local, a la que solo acudió el edil independiente y el concejal de gobierno, Odilo Barreiro, para dar explicaciones de lo sucedido. Carro asegura que los hechos fueron “gravísimos” y que hay que empezar a meter coto a este tipo de celebraciones y sin excusar la “falta de civismo” de una parte de los moañeses que participaron en estos hechos y de otros vecinos llegados a la localidad desde otros concellos, cree que desde la política se debe de actuar para que no se incumplan las normas frente al COVID-19. “Es cierto que la juventud se quiere divertir ¿pero a costa de quién?”, se pregunta el concejal de oposición, quien pide un punto de inflexión par salir de esta situación sin más muertes.

En la reunión, Leticia Santos asegura que se dio información a Carro de por qué se dieron los incidentes del sábado. Por parte del Concello se le dijo que él había participado en todas las reuniones con la comisión de fiestas, a invitación de la misma, para preparar la autorización de los festejos y se acordó que si cumplían todos los requisitos para ser autorizados, serían autorizados, como así fue, de lo contrario podrían incurrir en prevaricación. También se explicó la falta de apoyo de la Subdelegación a la petición de refuerzo de la Guardia Civil,en la noche de más jaleo.

"Quedada" de la juventud

La alcaldesa considera que el problema no estuvo en estos festejos, que incluían verbena, un concierto de rock y atracciones de feriantes, sino en la “quedada” de la juventud que demostró un comportamiento “incívico”, ya no solo por la suciedad de restos de botellas, vasos y bolsas con los que quedó el paseo marítimo, sino por la agresividad con la que llegaron a actuar algunos, con peleas por las que un joven acabó en el hospital con una costilla rota además de actos vandálicos como la rotura de la luna de un coche. También asegura que uno de los jóvenes agredidos llegó a manifestar a la Policía que había recibido una descarga eléctrica presumiblemente de una pistola taser, de las que utilizan las fuerzas del orden, aunque en el lugar los agentes no encontraron nada. Se sospecha que la persona que lo denunció pudo haber recibido el “disparo eléctrico” de unos aparatos que son linternas que llevan detrás un zona de descarga.

Añade que desde el Concello se reforzó la Policía Local con dos patrullas y se pidió por escrito la colaboración de la Guardia Civil a la Subdelegación del Gobierno, pero solo acudió en la noche del viernes al sábado y dejó a la Policía Local sola en la noche del sábado al domingo y se vio desbordada. Dice que es fácil culpar al Concello, pero entiende que también hay que ir a la responsabilidad individual de estos jóvenes, muchos de ellos menores que estaban haciendo botellón hasta las ocho de la mañana.

"Injusto que paguen la hostelería y la cultura"

Leticia Santos cree injusto que ahora sean los sectores de la hostelería y la cultura, en los que incluye a las orquestas y atracciones de feria, los que paguen la consecuencias, cuando están cumpliendo con las medidas anticovid y es muy difícil contagiarse en un restaurante desinfectado y ventilado. Respecto a las atracciones de feria, asegura que el informe jurídico externo encargado por el Concello para la autorización permitía el horario hasta las cuatro de la mañana y asegura que su presencia no fue la que originó las peleas, ya que el viernes también estaban y no pasó el jaleo del sábado.

Quiere matizar que ella no culpa de incívica a toda la juventud, sino “a las personas aglutinadas incumpliendo las normas, porque sí hubo personas que no decidieron participar”. También señala que la mayoría de las personas que tuvieron este comportamiento incívico no eran de Moaña, por lo menos las que figuran en las denuncias que realizó la policía en la noche del sábado y domingo por agresiones y actos de violencia eran personas de fuera, “ninguna de Moaña fue denunciada”.