Los guardapescas de Moaña decomisaron 8,8 kilos de vieira a dos furtivos en la zona conocida como O Forno de Cal o Calera, que divide el litoral moañés del de Vilaboa. Los hechos ocurrieron alrededor de las 11.30 horas de ayer cuando un guardapesca observó el movimiento de un hombre de unos 65 años por las inmediaciones de la playa. Poco después comprobaron que otro varón de nos 40 años salía del agua con traje de neopreno y aletas. Fue hasta un coche a cambiarse de ropa junto al primer hombre que merodeaba por tierra, pero no abandonan el lugar.

La mercancía encontrada entre las rocas.

El guardapesca llamó a un compañero para peinar todo el entorno por si habían escondido algo. Fue entonces cuando encontraron entre las rocas, el saco con las vieiras. Una vez levantada el acta, el marisco fue devuelto al mar en la misma zona.