Ni habrá atracciones feriales ni tampoco jaimas en la explanada de Ojea en las Fiestas del Cristo de este año. Desde la concejalía de Cultura, de la que se encarga Aurora Prieto (ACE) se mantienen las precauciones a pesar de la buena evolución de la curva del COVID-19 en Cangas y el resto de España. Pero se prefiere no pecar por exceso. Así que las Fiestas del Cristo de este año no se diferenciarán mucho de las que hubo el año pasado. Sí que habrá conciertos, pero con el público sentado y guardando la distancia de seguridad. Aún no se sabe demasiado del programa, pero en el cartel es seguro prácticamente, Xosé Manuel Budiño, el gaiteiro de Moaña que querrá poner una pica en Flandes.
Los otros conciertos que acogerá la explanada de Ojea están aún sin cerrar, pero se puede decir que su gestión está muy avanzada. Hay que recordar que las Fiestas del Cristo se celebran a partir de la última semana de agosto. Teóricamente para esas fechas la población vacunada sería ya un porcentaje muy alto, tanto que con los números actuales el presidente de la Xunta de Galicia y el de España, Pedro Sánchez, tienen la intención de retirar la en julio la obligación de llevar mascarilla.
Pero también se intuyen ciertos problemas presupuestarios. Puede ser una buena excusa para equilibrar un presupuesto que a día de hoy todavía está sin aprobar. Por cierto, sí habrá pregón y el pregonero será de Cangas.
Con las atracciones feriales tampoco se quiere arriesgar. Pasa mucha gente por las mismas y no se garantiza totalmente que se cumplan los protocolos anti COVID-19, aunque algunos parques temáticos en España ya empiezan a funcionar. Ese también es un sector al que la pandemia afectó de lleno.
Pero la Concejalía de Cultura sí que destinará muchas actividades para el público infantil. De hecho, a lo largo del mes de agosto se van a celebrara numerosas actividades dirigidas a ellos.
De lo que se está pendiente también es de sí este año habrá procesión del Cristo o no. Por los protocolos que mantiene la Iglesia ahora mismo respecto al COVID todo hace pensar que no. Pero no se descarta que todo cambie, aunque para nada habrá una procesión multitudinaria.
