El Concello de Moaña recibió ayer, en el recinto ferial Ifema de Madrid, el primer premio del Congreso Nacional de Medio Ambiente, otorgado por la Fundación Conama y que reconoce el trabajo de los ayuntamientos para fomentar el desarrollo sostenible. Moaña se impuso en la categoría de municipios de 5.000 a 30.000 habitantes gracias a su proyecto de “Tratamento de residuos orgánicos mediante compostaxe in situ”. El jurado reconoció que una villa como la moañesa, en solo unos cinco años de trabajo, haya logrado poner en marcha 11 centros de compostaje comunitario y más de 400 individuales, completando el ciclo del tratamiento de residuos orgánicos con la recogida y reparto de estructurante y con huertas urbanas para ver los efectos del compost. En global, Moaña ha logrado ya sumar a más de 1.000 familias a este programa y el año pasado se trataron más de 100 toneladas de residuos orgánicos sin huella ecológica para ello y evitando su traslado a Sogama.
El premio fue recogido por la alcaldesa, Leticia Santos, de manos de José Antonio Valbuena, consejero de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias. A la salida del acto y tras una foto de familia con el resto de premiados, el concejal de Medio Ambiente, Odilo Barreiro, destacó “el estímulo importante que supone este galardón para nuestro trabajo y, sobre todo, el de las maestras composteras”. Y puso en valor, por encima de todo, “la gran acogida que el programa de compostaje está teniendo entre los vecinos, que son los verdaderos protagonistas del mismo”.
Junto a la regidora y a Barreiro, acudieron a recoger el premio Yolanda Pastoriza –maestra compostera del Concello– y su compañera Paula Casal, que es la técnica de la Mancomunidade. “Es importante el premio porque se nos reconoce el esfuerzo a nivel estatal, demostrando que las cosas se están haciendo bien”, apunta Pastoriza. Explica que seguirán con las charlas a grupos de 10 personas para, a corto plazo, poder seguir ampliando el número de composteros comunitarios.
La alcaldesa, por su parte, expresó el “honor” por este respaldo “al trabajo de seis años” y puso en valor el tratamiento in situ de residuos “que evita incluso la huella ecológica de los traslados”. Suma el galardón a la Bandeira Verde, concedida por la Xunta, “y en la que se reflejan otros esfuerzos como la apuesta por el bajo consumo energético”.
