Hoy se celebra el Día Internacional de los Trabajadores con muchos sectores laborales completando su primer año de adaptación al teletrabajo, impulsado por la pandemia de COVID-19. Parte de esos trabajadores de O Morrazo son los empleados de los Concellos. En Cangas, la mitad del personal de los departamentos administrativos se turnan en las oficinas. En aquellos con dos trabajadores, uno está de forma presencial y el otro trabaja desde casa, en los que son más, se dividen a la mitad. Se mantiene este sistema desde que entró en vigor el estado de alarma.
El próximo 9 de mayo, cuando decaigan las medidas extraordinarias, el gobierno local dialogará con los representantes de los trabajadores para analizar si siguen con el mismo sistema. El personal considera que los turnos burbuja deben seguir en marcha hasta que un porcentaje alto de los mismos esté vacunado.
Menos personal se sumó a trabajar desde casa en Moaña y Bueu. En el primer caso son siete los administrativos que teletrabajan. Todos ellos se dedican a la elaboración de informes y no deben atender presencialmente a los vecinos. Dos días a la semana cumplen su horario en casa. La resolución aprobada por la alcaldesa para regular el teletrabajo estará en vigor en Moaña de forma indefinida, con independencia de cómo evolucione la pandemia.
En Bueu, por su parte, hay dos trabajadores del Concello teletrabajando, uno a tiempo completo y otro dos días a la semana por razones de conciliación laboral y familiar. Está en el aire cómo se organizará la plantilla tras el 9 de mayo.
Manifestación en Cangas por el 1º de Mayo
El 1º de Mayo se deja sentir hoy en Cangas con una manifestación convocada por el sindicato CIG. La marcha partirá a las 12.00 horas del Concello y recorrerá el casco urbano. Los convocantes piden a los trabajadores de la comarca que se manifiesten bajo el lema “Por unha saída galega xusta da crise”. En concreto, la central sindical nacionalista exige derogar las reformas laboral, de negociación colectiva, de las pensiones, de las prestaciones por desempleo o todas aquellas que implicaron, a su juicio, “el desmantelamiento de los servicios públicos que siguen en vigor y están siendo utilizados para enfrentar a la crisis en este momento”. La CIG se muestra muy crítica con la gestión en materia laboral del Gobierno de coalición formado por PSOE y Unidas Podemos.
