Una bandada de patos de la misma familia sorprendió esta tarde a los conductores que atravesaban el centro de Moaña por la calle Ramón Cabanillas. La bonita estampa obligó a frenar a todos los coches y sus ocupantes no dudaron en inmortalizar el momento, echando mano del móvil. Se supone que procedían del tramo bajo del río de A Fraga o de la desembocadura del río Pontillón, por lo que tuvieron que desplazarse por el casco urbano durante bastantes metros.

La bandada, llegando a la acera.