Un grupo de deportistas que practican calistenia o “street workout” en el parque habilitado en Rodeira piden al Concello que adapte esas instalaciones a las necesidades, así como aprovechar el terreno circundante para ampliarlas, dotándolas de más aparatos y facilitando con ello la distancia social recomendada para evitar contagios de COVID-19. El colectivo ha elaborado una “propuesta de diseño” para su valoración por parte de los técnicos y responsables políticos del gobierno municipal, a los que se ofrecen para buscar puntos de consenso, de acuerdo con las necesidades y recursos de Cangas.
Miembros de este grupo aseguran que en el parque de calistenia de Rodeira no es posible realizar ejercicios más de dos personas al mismo tiempo sin incumplir el protocolo de seguridad para hacer frente al coronavirus, ya que “resulta imposible mantener las distancias”, dadas sus reducidas dimensiones. “A veces nos juntamos allí media docena de deportistas, o más, y no nos queda otra opción que esperar turno o ir en otro momento”, lamentan. Además, solicitan que se hagan algunos cambios para “ordenar lo que hay al uso que se le quiere dar”. Ponen como ejemplo la excesiva altura a la que se encuentran las “barras de dominadas”, lo que les obliga a subirse a una piedra para alcanzarlas.
“No se trata de que nos preparen aquí un gimnasio de alto nivel, pero sí se pueden hacer algunas adaptaciones” que cumplirían sus necesidades a corto plazo, señalan. Otra de ellas sería cubrir el suelo con material de caucho similar al que tienen parques infantiles y equipamientos de “street workout” o calistenia en otros municipios, que ponen como referentes. Estas instalaciones se utilizan “para realizar un entrenamiento físico y mental al aire libre, gratuito para todo tipo de usuarios y sin horarios”, argumentan los aficionados a esta práctica, que se puede desarrollar sin necesidad de usar pesas y “mejora notablemente la musculatura, la coordinación y la flexibilidad”.
