El Concello de Moaña inició los trabajos para el proyecto de restauración, señalización y puesta en valor de la histórica torre medieval de Meira, situada precisamente en la cumbre del conocido como Monte da Torre, con vistas sobre gran parte del territorio municipal moañés y sobre la ría de Vigo. Esta semana comenzaron las tareas de desbroce y limpieza de la zona para poder iniciar de inmediato las actuaciones sobre los elementos patrimoniales, según explica el concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro. Lo que se pretende es reexcavar las áreas que habían sido estudiadas en el año 1976, ampliando la intervención hacia la zona norte, en donde se localizaría la supuesta puerta de acceso al complejo defensivo. Se restaurará y consolidará todo el conjunto para hacerlo visitable a vecinos y turistas. Toda la actuación se acompañará de una señalización explicativa que dejará clara la importancia del enclave y su historia.

Para poder llevar a cabo esta recuperación del patrimonio es vital la colaboración de la Comunidade de Montes de Meira, que suscribió un convenio con el Concello al encontrarse la antigua torre en terrenos comunales.

La obra fue aprobada por la junta de gobierno local el pasado 21 de septiembre de 2020 y el 17 de diciembre el subdirector xeral de Conservación e Restauración de Bens Culturais –dependiente de la Consellería de Educación y Cultura de la Xunta– notificó la autorización para ejecutar los trabajos sobre el terreno. El 11 de enero se contrató el proyecto con la empresa Árbore Arqueoloxía S. Coop.Gal, por un importe de 14.786,20 euros. Se adapta al presupuesto con el que contaba la administración local, pues la actuación se financia con cargo a una subvención de la Diputación de Pontevedra destinada precisamente a rehabilitar y señalizar el patrimonio histórico y cultural de la provincia. A Moaña le corresponden 11.274,10 euros y el resto será asumido por el Concello con fondos propios.

La llegada del buen tiempo en estos primeros días de marzo aceleraron el inicio de los trabajos en esta actuación, pues en febrero se había anunciado que los arqueólogos proponían aguardar a que pasasen los temporales que azotaron a O Morrazo en el comienzo de este año.

Desde el bipartito defienden que esta actuación en Meira se suma a las ya ejecutadas en los últimos años para la puesta en valor del patrimonio cultural moañés. Entre estas actuaciones se encuentra la señalización de diversos petroglifos a través de paneles explicativos y mediante códigos QR. También se rehabilitaron lavaderos tradicionales como los de A Porta do Sol u O Con. Por otro lado, se señalizaron elementos culturales como las iglesias románicas de San Martiño y San Xoán de Tirán, la capilla de Samertolaméu o la mámoa de Chan da Arquiña, en Domaio.

Guerras Irmandiñas

La llamada “Torre de Meira” fue una construcción que comprendía apenas unos 96 metros cuadrados, situada en un promontorio de 140 metros de altitud. Todavía se pueden apreciar los cimientos, muy alterados. Su ocupación está documentada desde el siglo XV y perteneció a las casas nobiliarias de Meira y Valadares.

El derribo de la torre se remonta a las segundas Guerras Irmandiñas (1467-1469). Después, Pedro Álvarez de Soutomaior fue el que ordenó su destrucción hasta la base en el año 1476.

Los comuneros de Meira se han hecho eco, en su página oficial de Facebook, de un estudio histórico sobre esta estructura para dejar clara la importancia de darla a conocer a los vecinos y visitantes.