Los gobiernos de Cangas, Moaña y Bueu están ajustando sus presupuestos municipales para incluir el porcentaje del 1% del presupuesto de la Diputación de este año que el organismo provincial aprobó para destinar a ayudas directas a la hostelería, cerrada por el COVID, y que se aportan como suplemento del Plan Concellos. En total, la Diputación destina 1.644.969 euros en la provincia, que se distribuirán entre los Concellos, según criterios de población. Ayer solo Moaña tenía calculado el importe que le corresponde, en torno a 50.000 euros, que se añade al Plan Concellos de este año, de casi un millón de euros. Las ayudas las repartirán los propios Concellos, como siempre demandaron en la negociaciones que se abrieron a tres bandas entre Xunta, diputaciones provinciales y concellos, a través de la Fegamp, para acordar un fondo común en el segundo plan de rescate para la hostelería, autónomos y microempresas, al que el gobierno de Feijóo destina 75 millones de euros.
Esas reuniones concluyeron sin acuerdo ya que tanto Fegamp como las diputaciones de Pontevedra, Lugo y A Coruña pedían que la aportación de cada una de las administraciones (autonómica, provincial y local) fuera del 1% de sus presupuestos y que los concellos repartieran el fondo, algo que la Xunta no aceptó alegando falta de agilidad por parte de las administraciones locales.
La hostelería espera con desesperación tanto el plan de rescate de la Xunta como las ayudas de concellos y de Diputación, en una jornada nuevamente marcada por la polémica por la decisión del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que ha tumbado el cierre decretado por el Gobierno autónomo. Los hosteleros aquí comparten el argumento del tribunal vasco de que el sector “no es elemento importante de riesgo cierto y grave para la salud pública”. En O Morrazo, el sector ha convocado una manifestación para el día 19 en Cangas con el apoyo del comercio, consciente de que lleva quince días cerrado y sin conocer las condiciones del plan de rescate que la Xunta anuncia que sacará a mediados de este mes. Agrupados en una plataforma gallega demandan ser indemnizados porque la Xunta les ha obligado a cerrar.
Lo cierto es que el cierre de la hostelería, que solo está abierta para llevar, no ha frenado en seco el aumento de contagios de COVID en los municipios de la comarca en esta tercera ola, tras las Navidades, en donde solo Bueu ha salido de la zona roja bajando su índice de casos acumulados en los últimos 14 días a 233, por debajo del ratio permitido de 250.
El concejal de Hacienda de Moaña, Aldán Santamarina, asegura que con respecto al reparto de las ayudas, el Concello tendrá que aprobar unas bases para determinar la cuantía por establecimiento de hostelería. La Diputación, y con el fin de agilizar la tramitación, ha convocado un pleno extraordinario para este viernes, para la aprobación de estas ayudas y las bases para que los concellos presenten sus solicitudes.
El concejal de Hacienda de Bueu, Julio Villanueva, asegura que por parte de este Concello se van a adherir y critica que la Xunta pida ayuda a los concellos para salvar a la hostelería, cuando es quien recibe los fondos del Estado de ayuda para la crisis sanitaria del COVID.
Bueu sale de la zona roja y solo Moaña sube
La tercera ola del COVID empieza a remitir en la comarca, aunque de forma desigual por concellos. Bueu sí sale de la zona roja con 28 casos, según el mapa del coronavirus del Sergas que también coincidió ayer con el dato de la gerencia del área sanitaria (EOXI). Con estos casos, Bueu tiene una incidencia acumulada a 14 días de 233 casos por cada 100.000 habitantes (por debajo de los 250 de límite). Moaña sube en dos casos con respecto al día anterior y se sitúa con 118 y una incidencia acumulada de 608. Cangas baja 9 casos -queda en 131- y reduce su incidencia a 494 por cada 100.000 habitantes. Los colegios también experimentan un descenso de positivos con respecto al viernes, cuando había 18 centros afectados (2 en Bueu, 9 en Cangas y 7 en Moaña) con 53 casos. Los datos del Sergas de ayer dejan a la comarca con 17 centros con positivos -O Hío en Cangas ya no figura-. En Bueu siguen A Pedra e IES Johan Carballeira aunque bajan los casos de 6 a 4 (2 en cada uno de los centros). Moaña continúa con 7 centros escolares, si bien baja de 22 a 18 casos: Quintela (1), Reibón (5) y un aula cerrada; Seara (1), Tirán (1), Domaio (2) con sendas aulas cerradas; IES As Barxas (5) e IES A Paralaia (3). Por lo que respecta a Cangas, tiene 8 centros con casos positivos. El colegio Compañía de María es el centro con más contagios (10). Coiro tiene 4; Nazaret (1), San Roque (2) y un aula cerrada; Casa de la Virgen (1), IES Rodeira (5), IES María Soliño (1) e IES Monte Carrasco (1).
Mucho interés y listas de espera en algunas farmacias para hacer los tests de saliva
La mayoría de las farmacias de la comarca ya tienen el material para poder realizar el cribado masivo para detectar casos de COVID-19 a través de tests de saliva. Ayer era el primer día en el que los vecinos podían acercarse a las boticas para recoger los tubos e informarse. La iniciativa despertó gran interés en los tres municipios y a lo largo de la jornada las farmacias resolvieron muchas dudas. Cada establecimiento tiene un cupo de diez muestras diarias y en Cangas hubo casos en los que el material se repartió antes de las 13.00 horas. En algunas boticas han decidido habilitar listas de espera ya que han recibido los recipientes para toda la semana. Una de las dudas más frecuentes es si las personas que residen en la comarca, pero tienen tarjeta sanitaria de otra comunidad, pueden tener acceso a esta prueba. Los farmacéuticos explican que en este caso no es posible ya que es necesario tener cartilla del Servizo Galego de Saúde (Sergas). En Bueu las farmacias constatan que durante el primer día hubo muchas consultas e interés por parte de los vecinos, aunque ayer por la tarde eran pocas las que habían agotado el cupo. “La gente está preguntando y son muchos los que prefieren esperar. En Bueu se hizo hace muy poco tiempo un cribado masivo y este programa va a estar activo por lo menos dos meses, así que lo dejan para más adelante”, explicaban desde algunos establecimientos.
