Recogida del mercadillo ambulante de ayer en Cangas. | // G.NÚÑEZ

El número de contagios por coronavirus sigue aumentando en O Morrazo, que se acerca a la barrera de los 300 casos activos. Más de la mitad de los positivos están en Moaña, que sigue batiendo registros y según el Sergas ayer se contabilizaban hasta 151 personas afectadas -154, según la Estrutura Organizativa de Xestión Integrada (EOXI) de Vigo-. La sexta parte de los contagios totales se concentran en los centros educativos, donde hay hasta 46 casos repartidos entre 16 escuelas infantiles, colegios e institutos.

La información que aporta el Sergas a través de la web coronavirus.sergas.gal informa de que ayer había en Moaña 151 contagios, cuatro más que con respecto a la jornada previa. En Cangas esa cifra es de 92, uno menos con respecto al jueves. No obstante, en la comunicación remitida ayer desde la (EOXI) a la concejala Victoria Portas se apunta que los casos activos son 100. Ese tipo de discrepancias se mantienen también en Bueu. El mapa refleja 32 contagios, uno menos, mientras desde la EOXI Pontevedra-O Salnés se comunican 41.

Esta radiografía epidemiológica tiene su reflejo en el ámbito educativo., aunque los datos diarios que ofrece el Sergas tampoco están actualizados y hay colegios como el de Domaio, que el jueves aparecía con un aula cerrada cuando desde el lune sya no tienen positivos. Según el Sergas Moaña concentra el mayor número de casos, con 22 repartidos entre ocho centros: seis en A Paralaia y Reibón, donde hay también un aula cerrada; tres en As Barxas; dos en Quintela; y uno en Seara, Abelendo, Cocoricó y Dalila-Reibón. En Cangas hay 18 positivos en seis centros: siete en el IES Rodeira; tres en Casa de la Virgen y en San Roque; dos en Eduardo Pondal y Sagrada Familia y uno en O Hío. Finalmente, en Bueu hay tres en A Pedra y otros tres en el IES Johan Carballeira.

Las restricciones de movilidad impuestas a causa de la pandemia siguen cebándose con algunos servicios, como el transporte de ría entre Cangas y Vigo. Las navieras que operan esta ruta –Mar de Ons y Rías Gallegas– insisten en que intentan mantener un servicio “esencial”, pero anuncian nuevas reducciones en los viajes del fin de semana. Desde hoy se adelanta la última ruta, que será a las 21.00 horas de Cangas a Vigo y a las 21.30 horas de Vigo a Cangas. Durante la semana, los barcos saldrán cada media hora durante la mañana y partir de las 15.00 horas los trayectos serán cada hora.

Desde el BNG de Cangas critican esta decisión, que considera que deja “indefensos” a los usuarios del transporte de ría y que les obliga a esperar en el puerto hasta una hora en pleno invierno hasta la salida del siguiente barco. Desde la formación nacionalista aseguran que la postura de las navieras es “inadmisible” y afirman que la decisión responde a “a intereses empresariales y de beneficio económico”, por lo que desde el BNG de Cangas avanzan que presentarán iniciativas al respecto en el Concello y en el Parlamento de Galicia.

Por otra parte, la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos, recibió ya respuesta del conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, a la carta que esta misma semana remitió -también al Ministerio de Sanidade-, para pedir que la vacunación del personal del Servicio de Axuda no Fogar (SAF) se incluyera en la primera planificación de vacunación frente al COVID-19. El conselleiro le informa que en la Estrategia de vacunación, aprobada por el Ministerio, recoge los grupos prioritarios y que en el Grupo 3 de“otro personal sanitario y sociosanitario” está el del SAF.. Le comunica que ya se está preparando conjuntamente desde Sanidade y Política Social la logística para comenzar la vacunación de este grupo y que dentro de esta preparación contemplan una información a las entidades locales con los detalles a través de la Federación Galega e Municipios e provincias.

En cuanto a los controles para el cumplimiento de las restricciones, ayer fueron identificados cinco jóvenes (entre ellos dos menores) que estaban en un coche en la zona de monte de A Torre, en Meira.

Mercadillos de O Morrazo, un “oasis” que resiste al cierre

Los mercadillos ambulantes de Cangas, Moaña y Bueu se están convirtiendo en un “oasis” en el conjunto de la provincia, ya que se mantienen activos –aunque con las correspondientes reducciones de aforo decretadas por la Xunta– mientras en otros municipios han echado el cierre por el avance la pandemia de COVID-19. Los comerciantes de O Morrazo se quejan de la suspensiones impuestas en otros concellos, celebran que en los de la comarca apuesten por el diálogo frente a los cierres “unilaterales y sin fundamento” y muestran su “absoluta solidaridad” con los compañeros afectados, pues insisten en que se trata de una actividad que respeta las medidas de seguridad y que tiene lugar al aire libre, por lo que el peligro de contagio es significativamente menor que si se celebrara en un espacio cerrado, y así lo reconoce la Organización Mundial de la Salud (OMS). La presidenta de la Asociación de Vendedores Ambulantes de O Morrazo (Asvam), Mª Carmen Viéitez, y el secretario del colectivo, Álvaro Ferradás, aluden a los problemas que padece el sector y que se agrandan con las decisiones de cerrar algunos mercadillos adoptadas por sus autoridades municipales. Citan como ejemplos los de Redondela, Baiona, Tui, Porriño o Pontecaldelas, mientras que otros, como el de Sabarís, también ha corrido la misma suerte tras un período con el aforo reducido al 50%. Creen que si esa situación se prolonga, los profesionales corren el riesgo de tomar decisiones “desesperadas”, porque tienen obligaciones y gastos que afrontar sin obtener ingresos, si no les dejan vender. Además, las medidas más drásticas de la Xunta se limitan a la hostelería y no afectan de momento al comercio ambulante, aseguran, por lo que cerrarlo “no tiene lógica”. Desde Asvam valoran positivamente “el diálogo y la colaboración mutua” con los concellos de Bueu, Cangas y Moaña que permite mantener una actividad ya golpeada por los cierres perimetrales y el miedo de la clientela, aunque abierta, al menos. Reclaman que en otros concellos se apliquen los mismos criterios y se mantengan los mercadillos, pues los afectados están sometidos a una fuerte presión económica y psicológica, con graves consecuencias si no se les permite trabajar. “Sería la estocada final”, resume Mª Carmen Viéitez, que pide al organismo competente de la Xunta “que tome cartas en el asunto” porque la desesperación conduce al caos, como ya se está comprobando en otros países europeos.

A Madalena no celebra San Blas por la pandemia

Ni la tradicional bendición de los panes, ni juegos populares, ni charangas ni verbenas. Ni siquiera las bombas de palenque, ni los pasacalles ni las misas en honor al santo en la pequeña capilla. La comisión de fiestas de San Blas, en A Madalena (Darbo), cuya festividad se conmemora el próximo miércoles, día 3, ha decidido no celebrar ningún acto, ni lúdico ni religioso, ante el avance de la pandemia de COVID-19 y la necesidad de evitar situaciones que puedan propagar los contagios en esta virulenta tercera ola. Se trata de una decisión “extraordinaria” obligada por la crisis sanitaria, señalan desde el colectivo organizador, aunque la intención es “regresar con fuerza” el próximo año, si el coronavirus remite, para que esta tradición no se pierda. La decisión de suspender los actos festivos ya estaba tomada, pero en los últimos días la comisión optó por hacer lo mismo con las ceremonias religiosas porque cree que “no es momento de arriesgar”, con los datos de contagio en máximos.