El director del Observatorio Ramón María Aller de Santiago, el astrónomo José Ángel Docobo, asegura que siguen investigando el bólido o meteoroide que iluminó con su gran resplandor el cielo de Galicia en la madrugada del lunes y que fue grabado por el vecino de Cangas Juan Antonio Fernández, con la cámara de observación meteorológica que tiene encendida las 24 horas del día durante los 365 días del año en su ático. Inmortalizó el paso fugaz de la gran bola de fuego sobre el casco urbano, en su trayectoria visible desde el norte de Portugal y Galicia en sentido hacia el norte de Castilla y León, sobre todo hacia el Bierzo, en donde Docobo sospecha que pudo haber caído, porque hay testimonios de vecinos que además del resplandor, oyeron un gran estruendo.

El director del Observatorio de la Universidad de Santiago reconoce que están recabando información sobre los vídeos grabados por particulares que se han colgado en las redes sociales “y que requieren de un tratamiento científico para hacer un cálculo de la trayectoria atmosférica y saber el punto final de la luz”.

Admite que la actual situación de restricciones de la movilidad por la pandemia del coronavirus, impide un buen trabajo de campo. Asegura que en otra circunstancias estaría con dicho trabajo de campo, pero con las prohibiciones por el COVID, confirmar la caída a tierra del bólido, convertido en meteorito, va a ser muy difícil. Hasta la tarde de ayer, en el Observatorio no habían recibido ninguna notificación de hallazgo.