La pandemia del coronavirus ha acabado este año con una tradición milenaria en Aldán, su danza y contradanza en honor a San Sebastián que hoy no se podrá bailar como se ha hecho desde 1678, con sus cinco damas, diez galanes y un guía para rendir la ofrenda de la parroquia en el día del santo. Pero la Asociación Cultural San Sebastián, que preside José Carlos Docampo, no ha querido dejar pasar la fecha sin ningún atisbo de danza, y se harán las venias al santo, que son las genuflexiones cuando damas y galanes se arrodillan ante San Sebastián.

Eso sí, solo realizarán las venias una fila de la danza, con una dama, dos galanes y el guía, además del gaiteiro y el caixeiro para dar música a los pasos de la danza. Nueve pasos hacia delante, primero ante el Cristo y después ante San Sebastián, y genuflexión cada tres; y nueve pasos para atrás, repitiendo las genuflexiones.

Docampo asegura que la danza se podría bailar estableciendo la separación entre las damas y los galanes, pero el problema estaría en la aglomeración de gente para verlos, como ocurre todos los años en el festivo en la parroquia, de ahí que hayan acordado no bailar la ancestral danza para acatarse a las normas contra el COVID.

Las venias se van a realizar tras la misa de las 12:00, que este año no oficiará, con toda probabilidad, el párroco por problemas de salud.

Docampo asegura que le hubiera encantado que se pudiera bailar la danza, pero la situación no permite otra cosa, aunque se ha ofrecido a que, si se les autoriza, puedan representarla en verano con todas las damas y galanes.