En plena tercera ola, los técnicos de emergencias de la ambulancia del 061 con base en Cangas siguen sin la máquina generadora de ozono que complementa las tareas de desinfección de este vehículo y también del que tiene su base en Moaña. “Han pasado ya dos meses desde que la maquina fue retirada para una reparación que solo tiene un coste de 75 euros pero que nunca acometen”, dice el personal.
Desde el sindicato CIG entienden que este retraso se debe exclusivamente a un “conflicto sindical por las decenas de reclamaciones y denuncias que acumula la empresa concesionaria por parte de este sindicato”. Piden que las instituciones entren en el asunto “porque no se puede perjudicar a trabajadores y a los usuarios por un conflicto sindical”.
Desde el 16 de noviembre, cada vez que la ambulancia de Cangas traslada a un paciente con síntomas compatibles con COVID-19, debe desplazarse a la Avenida de Madrid de Vigo para desinfectar con ozono el vehículo. “Esto provoca que la ambulancia tarde mucho más en quedar de nuevo operativa, originando retrasos en la asistencia a la población que tenga una urgencia sanitaria”, apuntan desde la central sindical. “En las instalaciones de Vigo disponen de tres máquinas de ozono para 10 vehículos, por lo que resultan habituales las esperas de hasta media hora para las desinfecciones”, critican.
El pleno del Concello de Cangas acordó, este mismo mes, demandar al Sergas el restablecimiento de este servicio de desinfección, inoperativo desde hace dos meses.
Desde el personal se toman “como una broma de mal gusto” que la concesionaria renovase esta misma semana la base de A Estrada con un sistema de desinfección, sin que atienda sus demandas desde Cangas. Esgrimen también deficiencias en el mantenimiento del espacio, con desperfectos en las taquillas y en algunos enchufes.