El 2020 ha sido un buen año para la construcción en Moaña, en vista del balance de licencias que otorgó el Concello. En total se aprobaron 355 permisos de construcción, tal y como asegura el concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro (BNG), lo que suponen 15 más que el año anterior y haber roto con el desierto que se atravesaba desde hacía varios años en lo que respecta a la construcción de edificios.
Entre las licencias otorgadas el año pasado están tres para vivienda colectiva, que supondrán 68 nuevos pisos que saldrán a la venta en el mercado y que harán que Moaña siga siendo un municipio atractivo para vivir e invertir desde el otro lado de la ría y, en concreto, para los vigueses dentro del área metropolitana.
Las tres licencias para vivienda colectiva son para una promoción de 14 viviendas en la calle José Costa Alonso, en la zona costera de O Con; otra para un edificio de 27 viviendas en la esquina de Sisalde con Rosalía de Castro, que va a experimentar un fuerte crecimiento con el desarrollo urbanístico de esta zona de la mano de la construcción del centro de salud que implica también la posibilidad de construir 59 viviendas en su entorno.; y la tercera, para 11 viviendas está ubicada en la calle Ramón Cabanillas, esquina con Batalla del Callao y Navas de Tolosa.
Por el momento la obra que está más avanzada es la de O Con, en donde ya está la estructura del nuevo edificio levantada. Se trata de un bloque con sótano, planta baja, tres plantas y aprovechamiento bajo cubierta. La planta sótano alberga 10 plazas de garaje y 6 trasteros, mientras que en la baja también se diseñan 8 trasteros y 10 plazas de aparcamiento. En las plantas altas se proyectan cuatro viviendas por planta, de tres dormitorios y algunas con terraza.
El edificio proyectado en Sisalde, estructurado en dos bloques con frente a esta calle y la de Rosalía de Castro, incluye sótano, semisótano, planta baja y dos alturas, además de aprovechamiento bajo cubierta. Todavía no se iniciaron las obras. Se proyectan diez viviendas por planta y también en la baja, en donde la licencia contempla un bajo comercial en la esquina del edificio. En la planta bajo cubierta se proyectan siete viviendas entre los dos bloques. El sótano se divide en 38 plazas de aparcamiento y 22 trasteros, además de que reserva espacio para contenedores. En el semisótano se proyectan 16 plazas de estacionamiento y 11 trasteros. Ambas plantas del garaje tendrán acceso por la calle Rosalía de Castro.
La tercera de las promociones de vivienda colectiva, ubicada en la travesía de Ramón Cabanillas, incluye 11 viviendas en un bloque de sótano, planta baja, tres alturas y aprovechamiento bajo cubierta. En el solar ya fue derribada la antigua construcción existente y un cartel anuncia la obra, pero aún no empezaron los trabajos físicos de construcción. La licencia contempla tres viviendas por cada una de las tres plantas y dos más en el aprovechamiento bajo cubierta. En el sótano se contemplan 5 plazas de estacionamiento.
Barreiro: “Se verá la incidencia de la crisis post-COVID”
Para el concejal de Urbanismo de Moaña, Odilo Barreiro, el incremento de licencias muestran una cierta recuperación del sector de la construcción, que atribuye, sobre todo, a contar con un Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) y a los servicios que ofrece el municipio. Recuerda que Moaña tiene aprobado un PXOM desde 2016 que da seguridad jurídica a los promotores. Señala también que la evolución del Concello en cuanto a urbanismo, movilidad y recuperación ambiental, así como la oferta de diferentes servicios hacen que Moaña sea un lugar “amable y atractivo para fijar la residencia”. Confía en que este año siga la pujanza de licencias, aunque está supeditado a la incidencia de la crisis post-COVID.
