Parques Nacionales ha remitido en los últimos días cartas a más de una decena de vecinos de Ons reclamando las tasas supuestamente impagadas por sus concesiones. La situación, que ya se había producido en algún año anterior de modo puntual, se repite en esta ocasión de forma masiva, con entre diez y quince afectados a mediodía de ayer, una cifra que se esperaba pudiese incrementarse con el paso de los días.
Los afectados argumentan que están al corriente de pago de las tasas que abonan por sus concesiones –con cantidades variables en función del tipo y características de las construcciones, pero que de media podrían suponer unos 800 euros anuales– y que así lo justificaron en su momento a Parques. De hecho, han puesto en conocimiento los hechos ante la Asociación de Vecinos y Amigos de Ons, y esta ya ha enviado a Parques una carta reclamando que se revisen los datos para poder solucionar la incidencia a la mayor brevedad posible, “ya que todo apunta a que se trata de un error”.
Desde el colectivo apuntan que a alguno de los afectados se le reclaman cantidades desde 2014, cuando se aprobó el sistema de concesiones. A otros se les reclama el equivalente a un año pero sin especificar los recibos que no le constan como abonados.
El pago de las tasas se realiza una vez Parques envía a cada vecino un impreso de autoliquidación con la cantidad que debe desembolsar. El pago se realiza en el banco y posteriormente los concesionarios deben remitir el justificante de pago bien por correo electrónico, bien por correo ordinario, a fin de demostrar que ya ha satisfecho la cantidad solicitada.
Desde la asociación aseguran que el sistema de pago es “atrasado” y que provoca que se puedan originar estas situaciones. “Lo norma es que al abonar el pago por vía bancaria ellos ya tengan constancia del mismo y no haga falta enviarles ningún recibo”, señalan. Pero además verían como algo más lógico el que Parques pueda ofrecer la posibilidad de domiciliar los recibos, habida cuenta de que las cantidades a abonar son las mismas y que eso facilitaría enormemente el pago por parte de las personas de mayor edad. Desde el colectivo también comentan que en ocasiones no les llega o les tarda en llegar el documento de autoliquidación. “Yo mismo tuve que volver a pedir una copia del segundo recibo del año porque no me lo habían mandado”, señala el tesorero de la asociación, Juan Comesaña.
