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Los contagios se multiplican por seis en Bueu durante el puente y se registran 23 casos activos

El viernes había únicamente cuatro casos | El repunte se vincula con reuniones familiares y tradiciones como la matanza del cerdo

Personal del centro de salud de Bueu realiza ayer un test de antígenos en el exterior del edificio. | // FDV

De ser un modelo a estar en estado de preocupación. La situación del Covid-19 en Bueu ha cambiado de forma brusca en pocos días, coincidiendo con el puente de la Constitución y de la Inmaculada. La causa parece evidente: la relajación de las medidas de autoprotección y el incumplimiento de algunas de las restricciones de movilidad, ya sea de vecinos que se trasladaron a municipios que estaban cerrados perimetralmente o viceversa. Esto redunda en que el el número de contagios se haya multiplicado por seis en apenas cuatro días: de los cuatro casos que se contabilizaban el viernes se ha pasado a 23 a primera hora de la mañana de ayer.

El aumento en los casos se empezó a hacer patente durante la jornada del sábado, cuando los test de antígenos que se realizaron en el centro de salud detectaron de golpe media docena de contagiados, una cifra que ya superaba los casos activos hasta a aquel momento. El domingo se detectaron tres nuevos contagios, el lunes hubo solo uno, pero durante el la jornada festiva del martes hubo hasta diez positivos más.

La buena noticia es que ninguno presenta de momento síntomas graves y todos los pacientes se encuentran en sus domicilios, sin que haya sido necesaria su hospitalización. El perfil de los afectados es muy variado: desde jóvenes hasta personas mayores y, en algunos casos, con patologías previas. Hay algún positivo que preocupa especialmente porque se trata de una persona que trabaja como cuidadora de mayores y dependientes.

Los focos de estos contagios no están claros en todos los casos, pero las explicaciones aportadas por los pacientes permiten identificar el origen de al menos alguno de los brotes. Hay un grupo que parece estar vinculado con una comida familiar en un restaurante de Bueu. Y hay otro que está relacionado con una de las tradiciones más arraigadas de estas fechas: la matanza del cerdo. Algunas personas han reconocido que participaron en alguno de estos sacrificios junto a vecinos que procedían de otros municipios que están cerrados perimetralmente, como el caso de Moaña o Marín. “En todo caso estamos hablando de una cierta relajación de las medidas de autopotección. Hay que tener mucho cuidado porque el virus es como una mancha de aceite, que luego no deja de extenderse”, explican desde el centro de salud de Bueu, que consideran especialmente significativo que este brusco repunte se haya registrado durante un puente festivo.

El personal médico espera que este rebrote sirva como una especie de toque de atención a la ciudadanía para que evite relajarse y mantenga en todo momento las medidas básicas de protección, como el uso de la mascarilla, el lavado e higienización de manos o guardar la distancia interpersonal de seguridad. “Las cifras no son una foto fija, sino que pueden cambiar de manera muy rápida si nos confiamos y nos relajamos antes de tiempo”, advierten los médicos.

Esta cifra de contagios es posible que siga aumentando en los próximos días. Las personas que han dado positivo deben facilitar una relación de contactos estrechos para someterse a una prueba de detección del coronavirus, por lo que es probable que esa cifra continúe incrementándose.

Se mantiene el nivel básico de restricciones

Bueu es el único municipio de la comarca de O Morrazo que no se encuentra en situación de cierre perimetral, algo que de momento no parece que vaya a cambiar. El Servizo Galego de Saúde (Sergas) mantiene a Bueu en alerta amarilla, que es el nivel de alarma más bajo y en el que se mantienen una serie de restricciones que se consideran “básicas”. Esto significa que la hostelería puede abrir hasta las 23.00 horas, con un máximo del 50% de su aforo en el interior y hasta el 75% en las terrazas y exterior. También se limitan las reuniones hasta un máximo de seis personas. Y al igual que en el resto de Galicia está vigente el toque de queda que limita la movilidad nocturna, que está restringida desde las 23.00 a las 6.00 horas. Estas medidas implican que los vecinos de Bueu pueden desplazarse libremente a otros municipios que se encuentren en la misma situación, pero no a aquellos que se encuentren cerrados perimetralmente y con medidas más severas, como es el caso de Cangas, Moaña o Marín. Por estos municipios solo se permite la circulación en tránsito o el acceso por alguna de las razones autorizadas. Estas limitaciones también afectan a los habitantes de los ayuntamientos en situación de cierre perimetral, que solo podrían acudir a Bueu con causa justificada.

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