El Concello de Cangas se ha sumado al Pacto de Alcaldes que lanzó la Comisión Europea en 2008 para atenuar los efectos del cambio climático y ha elaborado un Plan de Acción para el Clima y la Energía (PACES) que el concejal de Medio Ambiente, Hugo Fandiño (PSOE), quiere llevar al pleno del día 4 de diciembre. Se trata de un documento con casi un centenar de páginas en donde se perfila una serie de medidas para reducir en un 40% las emisiones de CO2 equivalentes del municipio para el año 2030, además de que valora los riesgos y vulnerabilidades del cambio climático en la localidad.
En el análisis de los indicadores que se incluyen en este plan se confirma la tendencia creciente de las temperaturas en el municipio de Cangas. Esta amenaza en la actualidad tiene nivel bajo, aunque ya se puede comprobar el aumento de temperaturas, de número de días y noches cálidas, así como el incremento en la duración de las olas de calor y, en consecuencia, de la necesidad de refrigeración producido entre los años 2010 y 2020. Se espera para los próximos 10 años un incremento pronunciado de estos valores, cifras que seguirán aumentando de forma menos acusada para 2100.
Según el cuadro del trabajo realizado, el indicador de temperatura máxima figura en 2010 con una media de 16.59 grados centígrados, de 16,81, en 2020 y un aumento de un grado en la proyección de 2030, con 17,44 grados y dos más en la proyección de 2100, con 19,7.
Por lo que respecta a la duración de las olas de calor, el estudio contempla una media de 11,67 días en 2010, de 12 en 2020 y sube tres días más en la proyección que hace en el horizonte de 2030, con 15,25 y se dispara a 43, 31 en el año 2100.
Entre los años 2010 y 2020 la media de días cálidos aumentó casi en 6 días, lo que representa casi el 15% de su valor y con respecto a las proyecciones entre los años 2020 y 2030, el número de estos días aumenta en un 33%. La media en 2010 fue de 41 días; 2020 figura con 46,94, 2030 aparece con 62,69 y 2100 con 117, 8. Se ve que la proyección para ese año eleva considerablemente el dato pasando de representar un sexto del total de días del año en 2030 a representar casi un tercio.
Las noches cálidas también es un indicador que analiza el estudio. El número de noches cálidas en la última década, la media de días aumentó en 8 y la proyección en este mismo tiempo será de 21 días, siguiendo el aumento a 2100 con una media de 40,41. Estos valores van en consonancia con el aumento de días cálidos y duración de los días de ola de calor.
Por el lado contrario, en cuanto a días con temperaturas mínimas inferiores a cero grados, la tendencia es a la desaparición de días de heladas en el municipio. En cuanto las precipitaciones el estudio aprecia cambios destacables en el descenso del número de días de lluvia y el aumento en el número de días consecutivos sin precipitación. También que aumentará la precipitación máxima en 24 horas, lo que implica que las lluvias serán más torrenciales pudiendo provocar la erosión del terreno. Las inundaciones son otro indicador. Cangas se encuentra en una zona baja de peligro y de riesgo de inundaciones, según el plan especial de Protección Civil ante el riesgo de inundaciones en Galicia, Indungal. El plan también pone el ojo en los ríos Presa, Bouzós y Pontillón.
El Concello reduce la emisión de CO2 en 928 toneladas
Uno de los objetivos es la reducción de las emisiones de CO2 derivadas del consumo de energía. Como año de referencia, el PACES recoge 2015 y en la fecha más próxima, 2019. Hace 5 años, las emisiones debidas al consumo eléctrico por el Concello (instalaciones y alumbrado público) fueron de 1738,79 toneladas de CO2 y las producidas por el consumo de carburantes del parque móvil municipal ( 4 vehículos de Policía Local, seis de Protección Civil, uno de bomberos, nueve de brigada de obras, dos de brigada eléctrica y seis viaria) fueron de 193,38 toneladas. Las toneladas totales de CO2 equivalentes emitidas en 2015 en el municipio se estiman en 62.227,07, con una tasa per cápita de 2,34 toneladas por habitante. El grueso del total se debe al consumo de combustibles fósiles. En el municipio, los sectores municipales, residencial y de transporte público y comercial fueron responsables de un consumo energético de 222.321 Mwh que provocó esos gases de efecto invernadero. Entre 2015 y 2019, Cangas ya logró una reducción en el sector público (alumbrado público e instalaciones municipales) de 928 toneladas de CO2. Se pasó de1.932 a 1.003, todo ello debido a los planes de acción que desde hace cinco años lleva a cabo el Concello de Cangas, como el cambio a luces led en el alumbrado. El Plan contempla, entre las medidas, programas que provoquen un cambio de actitud en la población sobre hábitos de consumo energéticos sostenibles. Serán medidas de mitigación o de adaptación. Las primeras consisten en evitar el aumento de emisiones contaminantes y la segunda, disminuir la vulnerabilidad ante las consecuencias del cambio climático. Se pretende realizar una auditoría energética, contratar un responsable para dirigir el Plan, rehabilitación energética de edificios municipales, renovación de los equipos de bombeo, renovar el parque móvil, mejorar las infraestructuras rurales que eviten la despoblación y un plan de emergencia ante sequías, además de aldeas modelo que consisten en la puesta en valor de tierras de labranza en riesgo de incendio.
