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Bueu licita de nuevo un crédito de 800.000 euros para asegurar la liquidez municipal

El plazo para presentar ofertas acaba el 7 de diciembre | El gobierno quiere garantizarse disponer de recursos en los momentos del año con menos ingresos y transferencias

Una reunión de la comisión informativa de Facenda de Bueu. | // GONZALO NÚÑEZ

El Concello de Bueu inicia de nuevo el proceso para licitar una operación de tesorería de 800.000 euros, un crédito con el que el gobierno local pretende asegurar la liquidez municipal en los momentos del año en el que no están al cobro impuestos y tributos de recaudación directa. Antes de suscribir esta nueva póliza el consistorio deberá cancelar la que tiene actualmente vigente, también por la misma cuantía. Desde los servicios técnicos apuntan que ese trámite se formalizará en los próximos días y siempre antes de la firma del nuevo crédito.

Desde el Concello se ha solicitado a las diversas entidades bancarias con las que la administración local tiene alguna cuenta abierta que presenten sus ofertas y tienen de plazo hasta el próximo lunes 7 de diciembre a través del Rexistro Xeral en horario de 9.00 a 13.00 horas. Las plicas se abrirán el miércoles 9 de diciembre y las bases hechas públicas ayer establecen que el criterio para la adjudicación de la operación de tesorería será el del menor precio ofertado u oferta más ventajosa. En este sentido se tendrá en cuenta el diferencial ofertado sobre el índice del Euribor a tres meses, según los pliegos de contratación.Las entidades pueden consultar en el departamento de Intervención la liquidación del presupuesto municipal y la cuenta general del año 2019 y el presupuesto de 2020 actualmente en vigor para poder realizar un estudio sobre la solvencia financiera del consistorio y perfilar su propuesta.

El objetivo es que la línea de crédito esté disponible desde principios de enero para que el ayuntamiento pueda atender las diversas obligaciones de pago en momentos en los que no estén al cobro los principales impuestos municipales o para cubrir eventuales demoras en las transferencias de otras administraciones.

Los tributos que suponen la mayor inyección económica para las arcas municipales son el conocido como “rodaje”, que empieza a pasarse al cobro en primavera” con un padrón que supone casi medio millon de euros, y el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), cuyo periodo de pago es durante el verano y asciende a algo más de 1,5 millones de euros.

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