El gobierno local de Cangas continúa firme en su idea de celebrar el mercadillo con una reducción de puestos del 50 por ciento a pesar de las peticiones formuladas por los ambulantes de ampliar el espacio destinado a esta actividad. La propuesta de extender el ámbito del mercadillo hasta la alameda de O Señal ha sido rechazada de plano por el regidor cangués, que lo justifica en que de ese modo se daría servicio únicamente a una veintena de puestos de los 75 que habría que trasladar. “Estamos hablando de un mercadillo que cuenta con 150 puestos habitualmente”, recuerda.

Xosé Manuel Pazos recuerda que existe una declaración del gobierno municipal al respecto, ratifica por un decreto de Alcaldía, y que la caída de las ventas tiene como origen el cierre perimetral de Cangas y el hecho de que la hostelería también esté cerrada.