Con el comienzo de las medidas extraordinarias por la crisis sanitaria que impuso la Xunta y que implicó el cierre perimetral de los municipios o grupos de municipios con una mayor incidencia del Covid-19, el control del tráfico en intersecciones clave de acceso y salida de O Morrazo se ha incrementado de forma sensible, con vigilancia puntual prácticamente todos los días en algunas de estas intersecciones.

En este contexto, los conductores que acuden cada día a trabajar a Vigo y comparten coche se encuentran preocupados ante el riesgo de ser multados. Aseguran, muchos de estos conductores, que la Guardia Civil de Tráfico les para en los controles de la rotonda de Domaio que permite el acceso al puente de Rande. Los agentes les advierten de que compartir vehículo entre personas que no son convivientes habituales puede acarrear una sanción en Vigo, al tratarse de un municipio con cierre perimetral y restricciones más severas.

Hasta el momento no ha trascendido ninguna multa por esta situación, aunque sí numerosas advertencias. Desde la Policía Local de Moaña reconocen la existencia de esta preocupación y señalan que por Moaña sí que se puede compartir coche por parte de no convivientes tratando de mantener la distancia social y siempre con la mascarilla puesta.

Moaña, a diferencia de Cangas y Vigo y su entorno, no tiene cierre perimetral ni medidas de restricción extraordinarias más allá del toque de queda nocturno. Si bien la semana pasada el número de positivos en este municipio había escalado hasta declararse la alerta roja, esta semana la situación mejoró, con menos de 21 casos activos y regresando a la alerta naranja.

La práctica de compartir coche para acudir a los centros de trabajo a Vigo está muy extendida entre los moañeses desde hace años, hasta el punto de que se llegaron a construir dos aparcamientos disuasorios para dejar vehículos y fomentar esta práctica.

Uno de los aparcamientos se ubica precisamente en el entorno de la rotonda de Domaio y el otro en la glorieta de Broullón que conecta con la Autovía do Morrazo. En ambos casos el espacio se suele quedar pequeño ante la cantidad de trabajadores que suelen compartir coche para reducir el consumo mensual de gasolina.