Representantes del Concello y de la UTE observan, ayer, los trabajos en la EDAR de Areamilla. | // G.NÚÑEZ

Con la visita del alcalde, Xosé Manuel Pazos, y del concejal de Urbanismo, Eugenio González, la UTE Gestión Cangas formalizó ayer el inicio de las obras de modernización de la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Areamilla dotándola de un sistema de desinfección por rayos ultravioleta, así como de conexión de la fosa de Donón a la red general de saneamiento. La inversión conjunta supera los 200.000 euros y ambas actuaciones finalizarán antes de fin de año, según previsiones de la concesionaria del servicio del ciclo integral del agua, que estuvo representada por su gerente, David Soneira, y otros miembros de la compañía.

En la EDAR de Areamilla, los trabajos consisten en la sustitución de las lámparas de luz ultravioleta y la renovación de los equipos de filtración, que desde la UTE anuncian como “prioritaria” para mejorar el servicio. “Es fundamental continuar invirtiendo en la red de Cangas para garantizar la calidad del agua. La renovación del sistema terciario de la EDAR aumentará su capacidad y eficiencia y es un primer paso en esta dirección, en la que queremos continuar de la mano del Concello”, apuntó Soneira.

Los nuevos sistemas de tratamiento terciario que eliminan la contaminación microbiológica del agua tratada en la planta están destinados a mejorar “en un 90%” la eficiencia de los rayos ultravioleta en eliminación de microorganismos. Además, la instalación de nuevos rotofiltros, unos discos recubiertos de tejido que eliminan sólidos en suspensión, incrementa la calidad del agua devuelta al mar, rebajando a mínimos su turbidez. Los trabajos finalizarán en cuatro semanas, “sin afectar al normal funcionamiento” de la EDAR, que trata alrededor de 9.000 metros cúbicos de agua al día mediante tres procesos: pretratamiento del agua, que elimina los agentes contaminantes flotantes; tratamiento biológico, que degrada la materia orgánica y separa el agua depurada y el fango resultante, y tratamiento terciario, que higieniza el agua eliminando los microorganismos para su reutilización.

“Evitar las pérdidas de caudal en la red”

La comitiva del Concello y la UTE también confirmaron el inicio de los trabajos de conexión de la fosa de Donón a la red municipal de saneamiento en Viñó, que “evitarán las pérdidas de caudal en la red” debidas al aumento en los últimos años de las viviendas y negocios en la zona. A través de una tubería de impulsión de 800 metros, las aguas acabarán llegando desde Viñó hasta la depuradora de Areamilla para su tratamiento, según explican los representantes de la compañía.