Hugo Fandiño se encontró a su regreso a Madrid, allá por el mes de julio, con una villa y corte en la que el Covid-19 había causado neurosis, sanitaria y política. El paso del tiempo empeoró la situación y ahora el concejal socialista vive casi confinado al sur de Madrid, zona de la que sale solo prácticamente para trabajar en el Ministerio de Exteriores, sito en la mismísima Plaza Mayor, tras cruzar la zona Lavapiés afectada por las primeras restricciones impuestas por el gobierno de la comunidad autónoma de Madrid que preside Isabel Díaz Ayuso.
Acude a trabajar andando, desde la zona de Embajadores, y tiene tiempo de ver las colas que hay en los centros de salud con los que se encuentra y las que hay también en los bancos de alimentos, cuyas sucursales se amplían para hacer frente a las necesidades. Afirma el edil socialista que los autobuses y los vagones de metro van llenos de gente, las más de las veces, hacinados. Asegura que así es muy difícil luchar contra el coronavirus, cuando lo más fácil sería aumentar las frecuencias de estos servicios públicos. Comenta que en septiembre se pusieron los primeros dispensadores de gel hidroalcohólico en el Metro de Madrid. y que cuando las autoridades los iban a inaugurar con gran despliegue ya no quedaba líquido que dispensar. Hugo Fandiño no duda en señalar que los madrileños viven con miedo, con miedo al coronavirus, pero también a la situación económica que se les viene encima.
Hugo Fandiño es socialista de carné. De ahí que haga referencia a la lucha que tuvieron las comunidades en las que gobernaba el PP para que se pusiera fin al estado de alarma, para que se les devolviera las competencias en materia de Sanidad, que son las mismas comunidades, con Madrid a la cabeza, que afirma que el Gobierno de Pedro Sánchez no hace nada. No puede evitar del desmantelamiento de la sanidad pública que hubo en Madrid en la etapa del Partido Popular.
La ciudad con la que ahora se encuentra es una capital "vaciada" por el coronavirus, con la ausencia de turistas, con las sillas y las mesas de las terrazas plegadas, con los restaurantes entregándote la cuenta a las 23.00 horas como invitación a dejar el local.
Pero a pesar del estado de alarma que aún durará otra semana más en la capital, Hugo Fandiño, podría desplazarse a Galicia para acudir a los plenos municipales, algo que hará el próximo día 30.
