Cangas y Moaña registran cinco agresiones por violencia de género en una semana

La lacra de la violencia machista ha golpeado con dureza a la comarca de O Morrazo en la última semana. Y es que entre el lunes y el viernes se han registrado hasta cinco agresiones de varones a mujeres que son su pareja o expareja. Las cinco llegaron a los juzgados de Cangas y, aunque en cuatro de ellas el abogado de la víctima solicitó una orden de protección, el juez determinó que esta medida con alejamiento obligatorio solo era necesaria en uno de los casos.

Los cinco casos incluyeron agresiones físicas y las víctimas cuentan con un parte médico de lesiones, aunque en ningún caso los daños son graves para la vida de las agredidas. Las cinco situaciones de maltrato se produjeron en Cangas y en Moaña y la última ocurrió entre una canguesa y su expareja, vecino de Tui. La última declaración se celebró el viernes por la tarde en el Juzgado Número 3 de Cangas.

El número de denuncias por violencia de género no remite en la comarca año tras año. De hecho, a lo largo de 2019 las mujeres de Bueu, Cangas, Marín y Moaña presentaron un total de 113 denuncias alegando haber sufrido algún tipo de maltrato. Sí que se constató un ligero descenso aunque en la última década fueron 1.546 las denuncias presentadas por mujeres debido a este tipo de violencia. El año 2017, por ejemplo, fue especialmente trágico con 231 denuncias. En 2018 habían acudido a los juzgados 177 mujeres por estas situaciones. Solo en Cangas, el pasado año acabó con 41 mujeres protegidas por órdenes judiciales, por las 13 vecinas de Bueu que se encontraban bajo la misma protección.

El último caso de extrema gravedad por una agresión machista en la comarca se remonta a febrero de 2019, cuando un hombre atacó a su pareja con un machete y se dio a la fuga, siendo detenido en la provincia de Ourense. La mujer, que había pasado varios días en el hospital, acabó cambiando su residencia y viviendo fuera de Galicia.

La pasada semana un policía local de Moaña intervino, mientras se encontraba fuera de servicio, para detener una agresión machista en Vigo en la que la víctima sufrió una patada de su pareja.

Las administraciones locales de la comarca organizan, a lo largo del año, un alto número de actividades y eventos educativos para sensibilizar a la población sobre este problema.

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