La pandemia de Covid-19 acabó con todas las fiestas tradicionales y romerías de O Morrazo este año. La celebración más concurrida de Moaña, la de San Martiño, no es una excepción y este año no habrá ni los tradicionales furanchos con vino de casa, ni las concurridas procesiones por el entorno de la parroquia moañesa original, ni verbena con orquestas. La Asociación Sociocultural San Martiño decidió ayer, en una reunión celebrada sobre las fiestas, que no habría festejos más allá de las misas.

En concreto, se celebrarán las misas el día 11 de noviembre en honor a San Martiño y el 12 de noviembre en honor a la Virxe do Carme. Ninguna estará precedida de la procesión pero la comisión sí que tirará fuegos a su finalización. En ambos días habrá misa a las diez de la mañana y después las misas solemnes a las doce del mediodía.

Además, las ceremonias religiosas comenzarán el día 2 de noviembre, lunes, con el comienzo de las novenas que cada tarde acercarán a los vecinos hasta los días grandes.

Desde la asociación que organiza los festejos señalan que optaron por la prudencia en un contexto de pandemia y con rebrotes en distintos puntos de Galicia que llevaron a la Xunta a prohibir las reuniones de más de 10 personas.

Recuerdan, además, que no se celebraron fiestas tradicionales en ningún punto de la comarca este verano, pues todas las comisiones prefirieron evitar riesgos. De hecho, la fiesta parroquial de O Carme, que siempre tiene lugar en julio, tampoco se celebró este año. La Asociación Sociocultural San Martiño aguarda que la situación sanitaria mejore y poder recuperar un evento tan característico para Moaña a partir del próximo año.

Este verano y el comienzo del otoño en la comarca se caracteriza solo por la organización de eventos desde los Concellos, con límite de aforo, distanciamiento social y controles de acceso. Así, en San Martiño se celebró recientemente la fiesta medieval Moaña Antiqua y la alameda moañesa acogió el Festival Intercéltico do Morrazo. Este fin de semana en Cangas se recreó el desembarco turco y el juicio de María Soliño, con mercadillo histórico.