Los terrenos propiedad de Abanca en la zona de Massó sufrieron una ambiciosa limpieza que cambiaron totalmente la cara a este espacio que unos y otros quieren proteger de forma ambiental. No obstante, el gobierno municipal desconocía oficialmente ayer quién había realizado estos trabajos muy similares, por otra parte, a los que se llevaron a cabo en el año 2016, en la zona de la ballenera, donde está el hotel y la zona de A Lagoa, que vuelve a verse, después de la que vegetación ocultase de una manera grosera este importante hábitat para numerosas especies de aves.

El Concello de Cangas sí que había realizado un requerimiento a la entidad bancaria para que realizase estos trabajos que ahora se efectúan y que ofrecen un drástico cambio de imagen de una zona invadida por la maleza. Había numerosas peticiones vecinales en este sentido. Hay que recodar que en el año 2016, el hoy concejal de Facenda, por aquel entonces edil de Urbanismo, Mariano Abalo, paralizó el desbroce de los terrenos de Abanca en Massó, aludiendo a la protección de la flora y la fauna. Después el alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos ordenó seguir, tras la protesta vecinal y estableció con la empresa unos criterios de limpieza de la zona.