Mientras el Concello de Cangas aseguraba el martes que el chiringuito de playa ubicado en la zona de afección de un castro en O Hío carecía de licencia municipal, la Consellería de Medio Ambiente aclara que había otorgado a la instalación una autorización, pero que eso no eximía al propietario de continuar con la gestión para conseguir las oportunas licencias, incluida la municipal. Pero el propietario del chiringuito no está de acuerdo con ninguna de las versiones, ni la del alcalde ni la de la Consellería de Medio Ambiente. Francisco Suárez afirma que tiene todos los permisos. Asegura que sacó licencia en el Concello, que tiene pagado el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y que tiene todos los documentos que le exigió la Xunta de Galicia. Asegura que mantiene el chiringuito cerrado debido a la pandemia, pero que la autorización es por cuatro años. Además, es desmontable al final de cada temporada.

Francisco Suárez recuerda que el año pasado pasó un inspector de Costas y le dijo que tenía que solicitar autorización también a este departamento, algo que hizo, sin obtener nunca una respuesta negativa. También afirma que es cierto que su finca está dentro de la zona de afección del castro, pero que en su finca no hay nada. "Tengo un altar de sacrificios a 50 metros y a 20 metros unas rocas con grabados. Pero esas no son fincas de mi propiedad. Además, todos los chiringuitos de la zona, tanto los de arriba como los de abajo, están en la zona de afección de castro, y en ningún momento fueron denunciados. No sé lo que pretende los ecologistas".