Una responsable de "O Chiringo de Massó", Lúa Miranda, alegó que "llevamos todo el verano haciendo conciertos. Los anunciamos y todo el mundo está informado. También trabajamos con el Canjazz y con asociaciones públicas. Reconoció que la actuación de ayer "se desbordó" a tenor de la cantidad de gente que acudió a ver a The Soul Jacket, que no llegaron a tocar.

La responsable del negocio alega también que todo el público llevaba la mascarilla. "La perspectiva que hay desde afuera no es la misma que en el medio del público, en donde se respetaban las medidas". Relata que "separamos más las mesas, desalojamos el paseo y la gente que estaba de pie llevaba mascarilla. Pero no hubo forma y nos cancelaron el concierto antes de empezar", lamenta.

Miranda entiende que la alta afluencia de público estuvo motivada por varios factores. The Soul Jacket es una banda de Vigo que normalmente no toca de forma gratuita. Vinieron porque la situación es muy compleja, somos conocidos y nos ayudaron porque la hostelería está muy mal. Entre la gente que acude al Chiringo y la que mueven ellos como grupo... por eso vino tanto público".

Después de que los agentes suspendiesen el concierto y mientras los músicos recogían los instrumentos y la instalación de sonido, todavía eran decenas las personas que siguieron disfrutando del chiringuito sin ser desalojadas por la Policía, aunque una gran parte de los asistentes se fueron al irrumpir los agentes y asumir que no habría actuación.

En sus redes sociales "O Chiringo de Massó" publicita todos los conciertos que ofrece este verano. Desde hace varios días tienen colgado el cartel de la actuación de ayer. El mismo jueves publicaron un texto sobre las medidas de seguridad: "Non reservamos mesa, para os bolos tendes que vir con tempo e no caso de non coller sitio podedes ver o concerto dende o paseo, neste caso gardando sempre as medidas de seguridade. Desculpade as molestias e graciñas a todos os que escribistes", concluye el post.