Prisión provisional comunicada y sin fianza. La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Cangas, en funciones de guardia, decretó ayer el ingreso en prisión de Juan José P.R., el último de los detenidos por la oleada de robos en esta localidad después de que volviera a robar un día después de ser detenido y puesto en libertad. La decisión se llevó a cabo en medio de una protesta de comerciantes que ayer se concentraron ante las dependencias judiciales con pancartas de "Xuíza escoita, o pobo está en loita", para reflejar la alarma social que hay por los robos y coincidiendo con la puesta a disposición judicial de este útimo detenido. Se trata de los mismos comerciantes que hace unas semanas, y cansados de la situación de tantos robos, colgaron carteles en sus establecimientos con advertencias y amenazas a los ladrones y se reunieron con el alcalde para exigir soluciones.

"Estamos contentos" asegura Carmen Pereiro, portavoz de un colectivo de comerciantes del casco vello, respecto al ingreso en prisión "pero lógicamente estaría bien si el resto también va entrando en la cárcel". Es algo que reclaman los comerciantes porque aseguran que los ladrones, a los que conocen como vecinos, les roban y luego les saludan y se pasean por delante de sus establecimientos como si nada hubiera pasado. Se quejan de que aunque sean detenidos, después el Juzgadoles deja en libertad.

Los comerciantes apuntan a cuatro personas como los presuntos responsables de la oleada de robos, aparte de Juan José P.R., el compañero con el que fue detenido el jueves y que quedó en libertad y una pareja más. Son conscientes de que roban por la adicción a las drogas, pero los afectados aseguran que ellos no tiene por qué pagar las consecuencias: "Se ríen de nosotros y nos sentimos impotentes. Si tienen una adicción, los deberían de ingresar. Exigimos más medidas para estar seguros", manifestaban en la concentración de ayer.

Respecto al ingreso en prisión del último detenido, Carmen Pereiro reconoce que que tuvo que ser debido a que ya estuvo anteriormente en prisión, aunque la alarma social que hay también fue importante.