José López Otero es el patrón de "Rosa de los Vientos II", un barco con base en el puerto de Bueu, y ayer por la tarde su estado de ánimo era una mezcla entre la tristeza y una comedida alegría. La alegría de haber ayudado de manera decisiva a recuperar el cadáver de Iván Harri Otero y aliviar el sufrimiento de la familia. Y la evidente tristeza por la muerte de un compañero del mar. "Desgraciadamente es lo que hay, venimos a ganarnos la vida y a veces nos quedamos aquí", explicaba emocionado.

El patrón de la "Punta Roncadoira" y los propios familiares le llamaron ayer a mediodía para pedirle consejo debido a su conocimiento del lugar. "El patrón de la lancha de la Xunta es un auténtico profesional, me preguntó si en la zona había pozos porque sabe que es a esas zonas a donde el mar acaba arrastrando los restos y objetos", contaba ayer.

El patrón del "Rosa de los Vientos II" tenía muy claro que cuatro días después del naufragio el cuerpo no podía estar muy lejos. "Las corrientes trabajan hacia el este [hacia el interior de la ría]. El primer día era normal que encontrasen la ropa y el móvil donde los encontraron, pero después era imposible que el mar llevase el cuerpo hacia fuera. Tenía que estar entre el sitio en el que cayó y el faro de O Camouco", contaba ayer. El patrón bueués delimitó el posible área en el que en su opinión podía estar el cuerpo del joven marinero de Arousa y apenas diez minutos después el propio hermano de la víctima lo localizó. "Es una zona en la que se puede pasar de 10 a unos 15 metros de profundidad", explicaba ayer. El punto donde lo encontraron distaba apenas 300 metros del sitio donde ocurrió el trágico accidente.

Tanto desde la embarcación de los Gardacostas como los familiares del fallecido agradecieron a José López y a su tripulación su ayuda. "Hoy [por ayer] fue un mal día porque apenas cogimos nada de pulpo. Pero pudimos ayudar al operativo y a la familia. Me quedo con eso, que es lo más importante", señalaba.

Curiosamente, cuando el pasado martes se tuvo conocimiento de que un barco se había hundido en Ons se corrió la noticia de que se había hundido "el Rosa". En Bueu fueron muchos los que al principio creían que era el "Rosa de los Vientos II" del propio José. "Estos días nos llamaba alguna gente para saber si estábamos bien. Nosotros también somos tres porque vamos un marinero, mi hijo y yo", contaba ayer.